Canterlot

Salvación Mediante Destrucción, Un fanfiction de RoflLuxRay

« Older   Newer »
  Share  
Dr.Fluttershai
view post Posted on 1/8/2011, 18:29     +1   -1




:Aplausos:

Luxray tengo que decir que me esta agradan demasiado tu historia, aunque apenas me tome el tiempo para leer los dos primeros capitulos y el prologo :^//^:
Bueno...es una genial historia, le dare seguimiento como todos aqui

QUOTE
Me gustan los waffles

Tututurutu tututu Waffles
 
Top
Paxncho
view post Posted on 1/8/2011, 18:36     +1   -1




Bueno, hay uno que otro error de tipeo por ahi pero no es nada del otro mundo

Me alegra el no haberlo leido ayer, mas que nada para no quedarme con la duda xD
Se sintio la tension en todo momento en el ambiente, hasta que Celestia al fin dio el si
Me gusto la personalidad que tiene Luna, la encuentro... no se, apegada a como se mostro en la serie xP
 
Top
RoflLuxRay
view post Posted on 2/8/2011, 05:01     +1   -1




Gracias a los dos por leer mi trabajo, creanme que la cosa solo se pone mejor!!!

QUOTE
Bueno, hay uno que otro error de tipeo por ahi pero no es nada del otro mundo

Gracias por apuntar la presencia de errores, debo dejar de confiarme (mas que nada ante la falta de acentos que Word no marca y una que otra redundancia o confusion de palabra por ahi). Bien dicen la practica hace al maestro, espero no tenga que editar este capitulo mas de una vez!!

Bueno, les dejo el capitulo 6 para que lo lean abajo!

Capitulo 6

SPOILER (click to view)
“¿Cuándo te iras de Ponyville?” Spike preguntó curiosamente, saltando a mí alrededor sin descanso.

“Me iré en dos días, la Reina Celestia me ha asignado como guardaespaldas personal de Twilight Sparkle para su próximo discurso en la ONU,” voltee a las escaleras por unos instantes pues me pareció oír a Twilight. Había sido un dia largo en Canterlot, pero valió la pena. Los estudiosos ponies entendieron mi plan rápidamente y analizan la mejor forma de implementarlo. Con la aprobación de Celestia solo faltaba la legalización de la ponificación en la tierra.

“Dime, ¿qué se siente ser humano?” pregunto mirándome intensamente a los ojos.

“Bueno,” aleje mi mirada de sus verdes ojos, “es muy distinto a ser un Pony. Tienes manos, piernas y dedos en las extremidades que facilitan muchas actividades. Pero no hay gran diferencia entre cómo se siente, y te comentare me siento más cómodo apoyado en cuatro patas.”

Spike suspiro al ver la hermosa mañana por la ventana a su lado, “Ojala pudiera volverme humano. Estoy seguro me vería mejor y Rarity caería rendida a mis pies si fuera un humano.”

“Por qué no me dices, si no te molesta que pregunte, ¿cómo algo entre ustedes podría funcionar si ella es un Pony y tu un dragón?” me arrepentí instantáneamente al ver la expresión en su rostro cambiar.

“¿Crees que ese sea al problema?” dijo angustiado.

“No lo sé, amigo. Sabes, los humanos somos buenos con esto de mujeres, traiciones y corazones rotos, solo tengo que hacer unas preguntas.”

“¡Adelante!” su cara se ilumino con felicidad al oír mis palabras.

“¿Cuánto tiene que conoces a Rarity?” caminé hacia una pequeña mesa de madera junto a la ventana, iluminada por los rayos matutinos que venían del cielo despejado sin rastro de nube alguna; y si alguna aparecía, un Pony Pegaso llegaba a patearla inmediatamente. Spike tomó una silla de lo que sería la sala y la jalo para sentarse frente a mí.

“Tiene un par de años que la conozco,” respondió sirviendo agua en un vaso de vidrio.

“Por ahí podemos comenzar, ¿Y por qué no le has dicho lo que sientes aún?”

“¿Tratando de convencer a Spike de confesarle su amor a Rarity?” Twilight dijo en tono burlón al bajar de las escaleras con las mismas bolsas grises de ayer en su espalda.

“Aprendo de su situación, y ¿A dónde te dirigías?” pregunte con el ceño fruncido.

“Voy a ver a Fluttershy y Pinkie Pie, y tengo que hacer unos mandados también. Leighton, cuida la biblioteca, y si te sales, hay un juego de llaves en la mesa junto la puerta, ¡nos vemos!” salió de la casa algo apurada, quizás se le hacía tarde pues dejo la puerta abierta detrás de ella. ¿Qué nadie cierra las puertas aquí?

“No le hagas caso, ¿en dónde estábamos?” el pequeño dragón se levantó a cerrar la puerta que su jefa había dejado abierta, “ah sí, ¿Por qué no le has dicho como te sientes?” recordé cuando Spike regresaba a sentarse.

“Oh…” bajo la cabeza pensativo, “no… no estoy seguro de cómo se sienta ella.”

“Si me dieran una moneda por cada vez que escucho eso,” suspiré pensando en mi argumento, “Mira, Spike, así funciona este negocio. Comúnmente, las mujeres son las que tienen que ser cortejadas pues les gusta y mantienen sus intenciones ocultas; probablemente nunca notaras le gustas a una chica a menos que te lo diga. La mayoría de mis relaciones formales nacieron del riesgo que tomé al decirles lo que sentía.”

“¿Relaciones formales? ¿Qué es una relación informal entonces?”

“Eh…” el responder la pregunta de manera directa me incomodaba, pero tenía que hacerlo, “¿has oído hablar del sexo?” su expresión se tornó un traviesa.

“Eh oído esa palabra antes. Escuche a Twilight y Applejack hablar de cómo había encontrado a Big Macintosh teniendo ‘relaciones sexuales’ con algún Pony. Busque la palabra aquí en la biblioteca y encontré un libro con muchas formas de ‘tener sexo’.”

“Bueno, pues una relación informal es una es la que las personas involucradas solo tienen sexo. Es una relación hueca sin sentimientos y tampoco tiene futuro; solo es para divertirse,” tomé un pequeño sorbo de mi vaso.

“¿Crees que Rarity quiera tener sexo conmigo?” no pude contener mi risa al oír su ingenuo comentario.

“Claro que no, no parece que le gusten esa clase de cosas.”

“¿Cómo le diré lo que siento por ella entonces?

“Simplemente entras a su casa con un montón de flores lindas y le dices: Rarity, tengo algo que decirte. El resto depende de ti, pero ten en mente que una vez que entras al cuarto no hay vuelta atrás,” Spike se levantó de golpe de su pequeño asiento con el pecho en alto.

“¡Eso es una gran idea! ¡Gracias Leighton!” corrió afuera y lo vi dirigirse hacia la florería enfrente por la ventana. Reí desde mi asiento por la determinación que vi en el, una muy infantil.

“Ahora estoy solo con mi soledad… ¿Qué no puedo hacer?” pensé volteando al techo de la biblioteca, el pueblo era bastante grande y tenía todo el dia. Me tome cinco minutos preparándome antes de salir a las soleadas calles matutinas de Ponyville cerrando la casa tras de mí. Caminé hacia el este hacia donde recordaba Spike me enseño el mercado, en donde al parecer era un dia malo o apenas empezaba el negocio, pues no había mucha gente o puestos en el.

Me acerqué a un pequeño puesto de madera y escuche una voz familiar.

“Que no, Apple Bloom, no puedes agarrar dinero pa’ comprarle un vestido a Rarity, ahora cállate y ayúdame con estas manzanas.”

“¡Pero Applejack!” Oí la voz de una niña pequeña quejándose.

“Sin peros, ya estas grandecita como para ganar tu propio billullo,” me asomé por encima del puesto y vi a Applejack acompañada de un potrillo amarillo con melena de color roja y un gran moño rojo tratando de levantar una pesada caja llena de manzanas.

“Buenos días,” caminé hacia un lado del puesto para ayudar.

“Oh, buenas Leighton. Ya volviste de Canterlot, ¿Cómo te fue?” Applejack empujó a su hermana pequeña para intentar levantar la caja.

“Convencí a Celestia de dejar a los humanos quedarse, ¿necesitas ayuda?”

“Si, por favor. Esta caja esta tan pesada como un sacerdote muerto,” entre los dos levantamos la caja y la pusimos en el puesto, su hermana comenzó a acomodar las manzanas alrededor inmediatamente después.

“Gracias, me habría tomado toda la mañana levantar esa maldita caja,” dijo Applejack con una sonrisa.

“¡Gracias señor!” agregó la joven Pony con una agradable sonrisa, esa potranca era simplemente adorable.

“Ah sí, esta es mi hermana pequeña, Apple Bloom. Ella me ayuda con el puesto,” Apple Bloom corrió hacia mí con una cara de berrinche, esperando me compadeciera de ella.

“¿Me regala unas monedas?” encontré difícil rehusarme ante cosa tan mas adorable frente a mí. En ese momento note su color de iris era muy parecido al mío.

“Con gusto si tuviera cambio, pero no se cual es el valor de cambio aquí por un billete de quinientos euros,” saque un billete purpura y la niña babeo al verlo.

“Podrías engañar a unos cuantos Ponies por aquí con eso,” Applejack empujó a su hermana lejos del dinero, “Pero esta potranca necesita aprender el valor del dinero ganándoselo.”

“Tu hermana tiene razón, pequeña,” acaricie su cabeza gentilmente, “gastar el dinero es una experiencia más satisfactoria si lo adquieres a través de tu sudor.”

Apple Bloom suspiró y se fue a atender el puesto enfurruñada, pues ya había un par de clientes esperando ser despachados.

“¿Qué te trae por aquí?” Applejack volteaba a ver a su hermana constantemente para asegurar que no extorsionaba a algún cliente.

“Pasaba por aquí, trato de acostumbrarme al pueblo,” tomó su sombrero vaquero de una caja cercana y se lo puso.

“Bueno, pues hoy es mi dia libre, así que ¿Qué dices si nos vamos a desayunar a algún lado?”

“Me agrada tu idea,” respondí con una sonrisa honesta, ella tomó algunas monedas de la caja registradora bajo la mirada llena de odio de su hermana.

“Sígueme, Leightn’, conozco justo el lugar para desayunar rico y barato,” caminó delante de mí con confianza, su melena rubia se movía con su andar justo en frente de mi cara.

“Sabes, es algo incomodo que alguien te este viendo el flanco,” me di cuenta de mi error y trote hacia su lado sonrojado de la vergüenza.

“Mis disculpas, Applejack.”

--------------------------------------------------------------------------------------------------

“¿Qué sigue en tu plan?” tomó un pequeño sorbo a la malteada de chocolate que pidió a través del colorido popote que se sumergía a la espumosa bebida. Alrededor varios ponies disfrutaban de un saludable desayuno bajo la protección de una sombrilla en sus mesas con forma de hongo. Los asientos estaban hechos de paja, pero eran bastante cómodos.

“Esperar, y rezar que esto funcione. Pero basta de mi, Applejack. ¿Por qué no me cuentas un poco de ti?” tomé mi pequeña taza de té hábilmente con una pezuña, ya estaba acostumbrándome a la falta de dedos.

“¿Yo?” dijo incomodada por la pregunta, “solo soy un Pony cualquiera que trabaja duro pa’ llevar el pan a la mesa.”

“Todos son interesantes, Applejack. Soy una persona muy sociable, como decimos los humanos. ¿Tienes más familia aparte de tu hermana menor?” crucé mis cascos en interés.

“Bueno, esta Big Macintosh, la abuela Smith y todos mi primos por allá en el oeste, y los tíos Orange también,” colocó su casco en su quijada, pensativa.

“¿No tienes familia propia? ¿Acaso nadie se reproduce por aquí?” mi pregunta atrajo miradas raras de todos los ponies lo suficientemente cerca para escucharla.

“No, no tengo,” las miradas se alejaron de nosotros, “no he encontrado al potro correcto, ¿por qué preguntas?”

“Es bueno ver se puede reproducirse aquí, al único niño que eh visto por aquí es tu hermana, y el gusto de Spike por Rarity me dio curiosidad.”

“Ah ese Spike…” soltó una breve carcajada, “ellos no pueden tener hijos, pero nada les impide ser una pareja.”

“Ya veo,” bebí todo el contenido de mi taza de una sola vez.

“¿Y tú qué tal? ¿Tienes familia propia? Su pregunta me hizo sonrojar inmediatamente.

“Alguna vez tuve una esposa e hija,” escondí mi vergüenza bajo mi calmado tono de voz.

“¿Dónde están?” la pregunta de Applejack no me ofendió, pero estaba tocando una parte de mi vida que no comparto fácilmente. Aun así, algo en mi aceptaba el que confiaba en ella lo suficiente para compartir esa información.

“Mientras la guerra se esparcía por la tierra, mantener a mi familia a salvo se volvió cada vez más difícil. Después de sobrevivir un bombardeo en Liverpool, no tuve otra opción que el asegurar estuvieran a salvo,” mi mente se lleno de imágenes de mi vida con ellos, todos los momentos de felicidad que me dieron. Baje mi cabeza mientras juntaba la fuerza para pronunciar las palabras que describían su destino.

“Yo… ponifiqué a mi familia por su bienestar.”

“Oh…” Applejack murmuró sorprendida, “¿no conservaron sus memorias verdad?”

“No, por desgracia. Mi esposa Angélica era una brillante ecóloga, y mi hija Blaire apenas estaba en el jardín de niños. Fue muy difícil, pero era lo mejor para ellos.”

“Pareces… tomar este asunto a la ligera,” preguntó con el ceño fruncido, pues mi cara no reflejaba emoción alguna. Por dentro, sin embargo, era otra historia.

“No lo tomo a la ligera, me rompe el corazón recordar doce años de matrimonio feliz y cuatro criando una niña. El cumpleaños de Blaire sería la próxima semana, ahora que lo recuerdo,” llené mi taza con el liquido verde contenido en una jarrita de porcelana blanca.

“¡Mira nada más! El cumpleaños de Apple Bloom también es la próxima semana,” dijo con una sonrisa optimista, contagiándome con una igual en pocos segundos.

“Felicitale cuando llegué el momento,” probé mi té para asegurar que la temperatura era la indicada, nunca confíen en un té humeante. Mis cascos alejaron la taza con el estimulo de mis labios, “¡Maldición esto está caliente!” mi grito atrajo la atención de todos los ponies alrededor una vez mas.

“Solo ignóralos, te ven raro porque no te reconocen de por aquí,” dijo con una sonrisa juguetona.

“Mi nombre es Leighton McRae, ¿podrían dejar de verme raro?” Todos cambiaron su atención a su respectiva conversación o comida, mientras Applejack reía sin control.

“¡Esas son agallas!” interrumpió su carcajear para poder hablar con claridad. Yo volví a sentarme tranquilamente para tomar té una vez más.

“¿Cuándo regresaras a la tierra?” su risa lentamente desvaneció.

“Dos días, aun tengo hoy y mañana para disfrutar el pueblo,” observe a un Pony rosado saltar de una manera físicamente imposible en la distancia, su esponjada melena se agitaba con sus saltos.

“Hey, ¿Por qué no me ayudas a juntar manzanas?” sus verdes ojos brillaron de una manera que convencería a cualquiera que los viera.

“Me parece una idea estu-”

“Ah, Leighton, ¡Ahí estas!” se escuchó una voz familiar en la distancia, voltee para ver era Rarity caminando hacia nosotros con bastante clase. No había visto que se podía caminar de esa manera, “Disculpen que los interrumpa de esta manera, hola Applejack-, Spike me dijo que estabas de vuelta en el pueblo y me preguntaba si ¿te importaría modelar algunos atuendos para mí?”

“¿Spike te dijo eso? ¿no mencionó otra cosa aparte de mi presencia en el pueblo?” pregunté mientras le servía una taza de té.

“No, pero si me dio unas flores el muchacho, que caballeroso de su parte,” tomó su taza con mucha gracia y bebió de ella.

“De hecho ya reservé esta tarde para ayudar a Applejack a recoger unas manzanaz,” traté de imitar el acento de la yegua naranja, pero falle miserablemente. Mi Scouse me hizo sonar como un perfecto imbécil, y las dos Pony rieron.

“No te preocupes Leighton, puedes ayudar a Rarity, yo-”

“¡Alguien que ayude!” una Pony rosa exclamó desde la entrada del restaurante, “¡un Grifo está atacando a una pobre potranca en un puesto del mercado!”

“Apple Bloom,” Applejack salió disparada en dirección al mercado, yo la seguí lo más cerca que pude con Rarity a mi lado. Vaya que era rápida.

“Pensé que estas cosas no pasaban en Ponyville,” dije tratando de abrir las alas firmemente pegadas a mi torso.

“No pasan. Un grifo no es muy común por aquí, y aun si vienen no suelen ser violentos,” Rarity respondió apretando el paso y alcanzando a Applejack en segundos, vaya que era rápida también.

“Podría alguien decirme ¿Cómo demonios es que estas malditas alas funcionan?” mis alas lentamente comenzaron a abrirse, a expandirse. El mercado estaba bastante lejos de nosotros, tenía que usar las alas si quería llegar a tiempo.

“No somos Pegasos, Leighton. Tendrás que descubrirlo por tu cuenta!” Applejack remarcó sarcásticamente. Los musculos en mis alas finalmente eran uno con mi cuerpo, pude sentirlas por primera vez cuando se abrieron por completo. Lentamente comencé a agitarlas hacia arriba y abajo, tratando de levantar mi cuerpo del suelo.

Esforzando mi cuerpo al límite, galopé lo más rápido que mi cuerpo me lo permitió y brinque cuando sentí estaba a máxima velocidad. Mis piernas aun se movían, pero el piso ya no estaba ahí, flotaba en el aire usando mis alas; se sentían muy naturales y no era difícil mantener el vuelo. Aceleré para rebasar a las yeguas y observar una figura café a la distancia junto al puesto de Apple Bloom, reconocible por la manzana roja tallada sobre la mesa de despacho.

“¡Deja a la niña en paz!” grité con furia segundos antes de notar no tenía ni la menor idea de cómo frenar. El grifo me volteo a ver con ira, sus garras manchadas con un poco de sangre y pulpa de manzana.

“¡Leightn’!” los ojos de la potranca se iluminaron al verme volar a toda velocidad hacia ella, estaba cubierta con un poco de sangre y pulpa de manzana pero no parecía herida gravemente. La bestia volteo su cuerpo hacia mi, esperando conectar un zarpazo letal cuando estuviera a distancia. La adrenalina lleno mis venas mientras veía al grifo hacerse más grande frente a mí, los músculos contrayéndose, las pupilas constriñéndose, el tiempo haciéndose más lento… podía sentir su influencia en mi.

Cuando me aproxime lo suficiente, soltó su zarpazo con rabia, me agache a tiempo para esquivarlo y usar mi impulso para patear sus pies. La colisión me detuvo y lo lanzó contra el suelo. Cuando me incorporé, el grifo rugió ferozmente hacia mí.

“¡Vamos!” le provoque con un chiflido y moviendo un caso, el grifo comenzó a correr hacia mi cegado en furia, tratándome de acertar otro zarpazo. Lo bloquee con una pezuña y rápidamente disloque su brazo con la otra, el crujido de sus huesos hizo temblar a todos los ponies alrededor, seguido de un gemido de dolor del grifo.

Le patee en el pecho antes de que terminara de gritar, la bestia cojeo hacia el otro lado con su brazo completamente inmovilizado. Vi a Applejack correr hacia su hermana, tomando a su pequeña hermana en brazos.

“¿A donde crees que vas?, aun no acabo contigo,” la bestia se volteo e intento volar hacia algún lado, pero le detuve en pleno vuelo tomándole de las alas, y haciendo palanca con una pezuña le disloque un ala. Un gemido de dolor más agudo llenó las calles del mercado mientras caía completamente rendido.

“Por favor… no me…” murmuró derrotado.

“¡No hay perdón para nadie en mi guardia!” prepare mi casco para conectar un golpe final en la nuca del grifo, pero justo antes de que soltara el ‘puñetazo’, Twilight corrió de entre la multitud me tomó del brazo.

“En la mía si lo hay,” dijo mirándome a los ojos, evitando tomara la vida del grifo.

“¿Piensas dejarme ejecutar a alguien alguna vez?” pregunté sarcásticamente.

“Parece que el grifo aquí ya aprendió su lección, no hay necesidad de matarle, ¿verdad?” bajo su mirada al herido grifo con autoridad, la bestia miraba al suelo con remordimiento.

“Gracias, Pony. Tu nobleza no será olvidada,” dijo el grifo con voz masculina, incorporándose lentamente y cojeando por la calle. Unos metros más adelante, dos Pegasos con armadura dorada descendieron del cielo y lo escoltaron.

“¿Están todos bien?” mire a mi alrededor para descubrir la presencia de al menos cien ponies alrededor de la escena. Uno de ellos comenzó a pisotear el suelo, emitiendo un sonido similar a un aplauso. El gesto se contagio entre la multitud y un estruendoso aplauso inundo el mercado.

“¿Con que así aplauden por aquí eh?” le pregunte a Twilight con una sonrisa orgullosa.

“No te hagas grande, estarían pidiendo tu cabeza si hubieras matado al grifo. Es más probable me aplaudan a mí que a ti.”

Ignorando su comentario, me acerque a las hermanas Apple, la pequeña solo tenía unos cuantos moretones y cortaduras, nada serio por fortuna.

“Gracias a Celestia que apareciste Leightn’. Ese grifo grosero enloqueció cuando le dije que no tenia cambio y quite unas manzanas de su canasta,” dijo con los ojos cristalinos, quedándose dormida después de su frase.

“Eso estuvo muy bueno, querido. ¿En donde aprendiste a luchar asi?” preguntó Rarity con mirada preocupada.

“Un par de libros de Jiujitsu y otros mas de Anatomía, ¿esta Apple Bloom bien?”

“Si, solo tiene un par de golpecitos aquí y allá. La llevaré al doctor por si acaso,” Applejack colocó a su desmayada hermana en el suelo.

“¿Necesitas ayuda con ella?” pregunté con genuina preocupación.

“No, no la necesita,” Twilight interrumpió con tono mandón, todos volteamos a verla con enojo tras su maleducada expresión.

“Solo está siendo cortés, no hay razón para ser una perra, Twi,” Applejack dijo con indignación.

“Lo siento, lo siento…” La unicornio purpura suspiro, “Leighton, algo pasó y necesitas volver a la tierra pero ya,” había un ligero toque de miedo en su voz que me preocupó. Tenía que ser algo importante.


Notas: Se leen despues del capitulo de favor xD

-Tenia que hacer que Leighton volára, y espero me haya quedado bien la descripcion que es de mis partes favoritas
-Me siguen gustando los waffles
-Ya hize una imagen de Leighton en el constructor de ponies standard, luego le filtro por aqui para que lo vean

Edited by RoflLuxRay - 2/8/2011, 16:07
 
Top
view post Posted on 2/8/2011, 06:54     +1   -1

Estudiante de Celestia

Group:
Artistas Pony
Posts:
649
Reputation:
0

Status:


No me acostumbro a los PoV .-.
Peeeeeeero tu fic va cada vez mas awesome... si no fuera PoV seria 20% cooler~ (?)

Tu descripcion de vuelo esta cool... pero la pelea (y post-pelea) me gustó mas

QUOTE
“Mi nombre es Leighton McRae, ¿podrían dejar de verme raro?” Todos cambiaron su atención a su respectiva conversación o comida, mientras Applejack reía sin control.

Me sentí identificado... XD

QUOTE
“Me parece una idea estu-”

Mi mente acompletó esa oracion de forma negativa... am I loco in the coco? (?)

Ah... por cierto...
SPOILER (click to view)
 
Top
Paxncho
view post Posted on 2/8/2011, 16:04     +1   -1




Igual como lo dijo Soul, la descripcion del Vuelo quedo bien, pero aun así una de las mejores partes fue la pelea y post-pelea (Con la Twi mandona (?) )

Bueno, como se ve, con cada capitulo que pasa, esto se pone mucho mas interesante
Asi que... a la espera del siguiente :3


QUOTE
“¿Con que así aplauden por aquí eh?” le pregunte a Twilight con una sonrisa orgullosa.

“No te hagas grande, estarían pidiendo tu cabeza si hubieras matado al grifo. Es más probable me aplaudan a mí que a ti.”

Hasta ahi le llego el Ego XD
 
Top
Dr.Fluttershai
view post Posted on 2/8/2011, 16:09     +1   -1




Vaya un combate de un pony contra un grifo....a mano limpia, la cosa mas genial que he visto, nunca lo habia pensado, es mas abrio a mi mas ideas :D!:

Bien, acabo de leer todos los capitulos ahora, su fanfic se pone mejor cada vez, esperando proximo capitulo y la imagen de Leighton

QUOTE
Mi mente acompletó esa oracion de forma negativa... am I loco in the coco? (?)

Ummm Soul, parece que tendras que tomar la terapia denuevo :U.U: (?)
 
Top
RoflLuxRay
view post Posted on 2/8/2011, 22:43     +1   -1




Gracias soul por el familar de bob esponja bailando al ritmo de la cancion que describe mi desyuno favorito : D

Y gracias a todos por leer mi trabajo, por eso les traigo el capitulo 7 (el de la suerte) para que le hechen un oclayo, esta algo larguito, eesta cerca de los 3.5k de palabras.

Capitulo 7

SPOILER (click to view)
“¿Qué paso exactamente?” pregunté alterado, Twilight caminaba en círculos frente a mi preocupada. Ella me arrastró desde el mercado a la biblioteca apurada, tanto que no pe dio oportunidad de despedirme de Applejack o Rarity.

“Celestia me hizo llegar un mensaje diciéndome las comunicaciones con las instalaciones en Rusia se cayeron. No hay respuesta,” tomó algunos libros de sus estantes, empecé a sospechar esa práctica era común en ella cuando estaba nerviosa.

“¿Y qué? Seguro fue un apagón, pasan muy seguido en la tierra.”

“No. Alguien intento a entrar a Equestria sin nuestra autorización hace unas horas, y no fueron los Rusos.”

“Eso si es raro, ¿Cuánto tiene que se cayeron las comunicaciones?”

“Diez horas. Leighton, alguien quiere entrar a Equestria sin permiso,” cerró de golpe un libro y otro se abrió después en su cara.

“¿Qué recomienda Celestia?”

“Va a enviar un equipo a la base Rusa para ver qué está pasando,” aventó el libro en su cara y otros dos flotaron hacia ella.

“No envíen un equipo, causara mas tensiones entre ponies y humanos, envíenme a mí,” le dije mirándola con determinación.

“Oh créeme que iras, Celestia me dijo estarás a cargo del equipo. Los verás afuera de la base cuando te envíe de vuelta a la tierra.”

“¿Qué no entiendes?” exclame con enojo, quitando el libro de su cara, “Todo esto debe ser una cortina de humo, quieren que envíen un equipo a desmantelar sus operaciones y cuando se divulgue la palabra de que un conjunto de ponies mataron humanos y científicos rusos, ¡tu credibilidad se va por el caño!”

“No,” dijo con un suspiro, “solo eres un Pony, digo, hombre. Quien sabe cuánta gente hay ahí, y si las instalaciones fueron tomadas.”

“Entonces si fue un apagón, solo hombre preguntando cual fue el problema se verá mucho mejor que un pelotón de ponies armados. Aparte, si las instalaciones fueron capturadas probablemente no abrirán fuego en un humano que pide ser ponyficado. Envíame, solo dile a Celestia, bien sabes puedo hacer el trabajo.”

Guardó silencio por unos minutos, ojeando unos cuantos libros más meditando, gruñendo enojada tras cerrar el último.

“De acuerdo, de acuerdo. Pero si Celestia me tira basura será tu culpa, no suelo desobedecer sus ordenes,” su cuerno comenzó a brillar en un color purpura más intenso que antes.

“Oye, no me digas piensas hacerme aparecer desnudo en algún lado de Rusia,” agregué sarcásticamente.

“Claro que no, los libros que estaba leyendo eran para hacerte aparecer con ropa y demás cosas una vez que cambies de dimensión,” el aire comenzó a ponerse pesado en la biblioteca y a soplan con violencia, levantado varios libros de sus estantes. Lentamente, la luz de su cuerno comenzó a ponerse roja, emitiendo rayos que, justo como la vez anterior, se concentraron en un solo lugar para crear el vórtex.

“Ahora que lo pienso, ¿cómo es que solo tú puedes viajar entre dimensiones?” empecé a sentirme nervioso al escuchar el rugido del agujero de gusano frente a mí.

“Es un hechizo que Celestia me enseñó, solo salta en el maldito agujero que esto es más difícil de lo que parece,” sus piernas cedieron ante el tremendo esfuerzo. Sin dudarlo, salte en el hoyo. La experiencia era tan dolorosa como la anterior, solo que ahora si pude apreciar como mi cuerpo mutaba. Y justo como la vez anterior, me desmayé a mitad del viaje.


Me desperté de golpe al sentir hielo en mi rostro, acababa de aparecer bajo un árbol de Pino en algún lado de Rusia. Era un dia soleado, el sol sólo ilumina en lugares como este.

“Seguro que no me dan millas de viajero frecuente por esto,” sacudí mi chaqueta de cuero negro e inspeccione mis alrededores. Frente a mi había una calle cubierta en su mayoría de nieve, solo mostrando el pavimento en sitios donde las llantas de los autos dejaban sus marcas. Cruzando la calle, había unos cuantos edificios abandonados algo desgastados por el tiempo, claramente nadie podía habitarlos sin esperar pasar frio o encontrar algunas ratas adentro. Noté estaba en un pequeño lote baldío en la esquina de la calle, siguiendo las marcas de la llantas a través de la calle, un pequeño puente cruzaba un profundo canal hacia un punto de control militar. Apenas lo podía apreciar en la distancia.

Junto a mí había un pequeño maletín negro cubierto parcialmente por la nieve, lo tomé y limpie todo rastro de nieve en el.

“Veamos que me enviaron…” abrí el maletín y una nota salto a mi cara inmediatamente. Parecía bastante seria, pues noté algo parecido a la silueta de Celestia en la parte superior izquierda del papel.

“Señor Leighton McRae.

Twilight ya me ha informado del riesgo que estas tomando, y aunque no lo apruebo del todo, lo permitiré pues reconozco es el mejor curso de acción por el momento. Mi estudiante también avala tu pericia en el manejo de armas de fuego y situaciones de alto riesgo, así que, aunque no seas un mercenario, policía o cualquier forma de autoridad, permitiré que hables y tomes acciones en el nombre de Equestria como creas sea más conveniente. Desde esta misión en adelante, nos referiremos a ti con el nombre código de LH7, un agente encubierto autónomo que trabajara bajo mis órdenes.

Ahora que hemos aclarado eso, tus ordenes son el averiguar los orígenes del corte de comunicaciones y restablecer la red de comunicaciones. Como un parámetro de la misión, tratarás de mantener el número de bajas lo más cercano a cero.

Reina Celestia.”

“¿LH7? Debí haber pedido 007,” arrojé la carta de vuelta al maletín y saque mi P229, la reconocí por la culata café que le mandé poner. Le escondí bajo mi chamarra en el pantalón de mezclilla oscuro, de donde podía sacarla rápidamente si lo necesitaba. Al vaciar los contenidos del maletín, lo arroje de vuelta donde lo encontré, tapándolo con una gruesa capa de nieve.

Caminé por las calles hacia el puente, donde se apreciaban mejor las rejas que protegían las instalacinoes.

“No creo que vaya a entrar disparando por la entrada principal, estaría rogando porque me mataran,” pensé al analizar los alrededores buscando la mejor manera de entrar.

“LH7, ¿estás ahí?” dijo una voz femenina que parecía venir de mi cabeza, con un poco de tiempo para procesar la información, deduje era la voz de Twilight.

“Si aquí LH7, ¿así que vas a regresarme el favor siendo la voz de mi consciencia?”

“Más o menos, estoy a cargo de la inteligencia de tu misión por un rato. Dime que ves en la entrada,” voltee mi mirada hacia un par de guardias protegiendo la entrada, estaban equipados con HK416, un rifle de asalto estándar con camuflaje para nieve.

“Dos guardias, ambos hombres. Uniforme militar… parece MCCUU. Están equipados con HK416, podría reconocer esa armas a kilómetros con un ojo tapado.”

“¿Qué es MCCUU?” preguntó confundida.

“Marine Corps Combat Utility Uniform, es el atuendo de guerra americano.”

“¿Americano? ¿Qué hacen ellos aquí?” preguntó con sorpresa y temor a la vez. Decidí acercarme a la entrada demostrando confianza.

“¿Por qué no les preguntamos?” los guardas notaron mi presencia y apuntaron sus armas hacia mí.

“Disculpe señor, está entrando a una zona restringida,” uno de ellos corrió hacia mí con su arma siempre apuntando a mi torso.

“Lo siento, pero esperaba que me dejaran ponificarme. Conseguí autorización,” observé al otro guardia meterse a una pequeña caseta gris después de que su compañero movió el brazo.

“Mi compañero verificará eso,” giró su cabeza para ver a su compañero, y en ese mismo momento, tomé su cuello y lo gire para desnucarlo, quitándole la vida con un solo crujido de su cabeza. El sonido del hombre pegando el suelo alertó al otro guardia, quien asomó su cabeza por una pequeña ventana cuadrangular corrediza.

“¿Richards?” rápidamente saqué mi pistola y le conecté un tiro directo a la cabeza, la pared detrás de él se manchó con sangre.

“¿Qué pasa LH7?” dijo Twilight con enojo.

“Le dispare a dos hostiles, entraré a las instalaciones en unos momentos más,” arrastré los cuerpos hacia un borde del puente y las aventé al canal, quitándoles un arma y una radio. Nadie se fijaría bajo un puente militar.

“Celestia dijo que no quería bajas,” remarcó con autoridad.

“Yo recuerdo leer que pedía que las mantuviera lo más cerca a cero que pudiera, trataré de no matar más gente.”

Regresé a la caseta manchada de sangre y abrí la cerca metálica con un botón. Emitiendo un agudo sonido chirriante, cerca se abrió lentamente, deslizando sus pequeñas ruedas por el concreto. Afortunadamente, no había alguien cerca para verme entrar.

“Necesitas colarte a las instalaciones y averiguar qué está pasando. Necesito investigar unas cosas, por lo que tengo que dejarte, no hagas algo estúpido por favor.”

“¿Ya te vas?” pregunté con una sonrisa juguetona, contemplando el gran estacionamiento de concreto frente a mí. Solo había algunos jeeps cafés claros estacionados en línea en ambos lados.

“Me tengo que ir Leighton, lo siento,” cesé mi caminar y miré hacia el edificio grisáceo de dos pisos frente a mí, una antena satelital de gran talla se asomaba en el techo del amplio edificio. Al final de la línea de jeeps, se podía ver pequeños caminos que iban hacia los lados del edificio, dando vuelta al cabo de al menos cincuenta metros.

“Al menos dime a dónde vas, no me dejes hablando como un idiota,” exclamé y no obtuve respuesta.

“Al menos ahora solo me escucharé a mí mismo,” pensé con sarcasmo y una sonrisa traviesa s dibujó en mis labios.

El edificio frente a mi no presentaba señales de vida aparte de la mía, pero eso no era suficiente para convencerme de entrar por la puerta principal. Decidí caminar alrededor del edificio en búsqueda de una ruta alterna. Al lado este del complejo, una puerta reforzada de color amarillo con una advertencia parecía mi mejor opción.

“Richards, adelante, cambio,” se oyó en la radio en mi bolsillo.

“Aquí Richards, adelante, cambio,” respondí imitando la voz del soldado que maté hace unos minutos. Siempre había practicado un acento americano regular para mezclarme con la gente durante mis viajes.

“¿Qué la pasa a tu voz?, cambio.”

“El maldito frio achica la garganta, ¿qué carajo esperabas?, cambio.”

“Si claro. Te comunico que el teniente Bradley nos quiere en el cuarto de comunicaciones para reportar ocurrencias, cambio.”

“Copiado, ¿en donde es? Este lugar es un maldito laberinto, cambio.”

“Siempre tienes que ser un idiota,” el hombre de la radio suspiró con bastante enojo, “Entras al edificio por las puertas principales y tomas el elevador de servicio hasta abajo, te bajas y es la primera puerta a mano derecha girando a la izquierda en el pasillo, cambio.”


“Gracias, no me perderé. Cambio y fuera,” apagué la radio y la aventé por la cerca. Los alrededores eran silenciosos, podía escuchar mis pasos y respirar con claridad sin interferencia de algún otro ruido.

“Parece que será al viejo estilo del tiroteo…” caminé de vuelta a la entrada, la adrenalina comenzó a fluir por mis venas con cada paso. Entrar por la puerta principal disparando es como rogar que te llenen el cuerpo de plomo, pero no había otra opción. Me recargue en la pared junto a las puertas dobles de color gris, revisando la munición de mis armas y cerrando mis ojos.

“No hay de otra, Leighton… es una completa estupidez pero no hay otra manera,” suspire tratando de calmar los rápidos latidos de mi corazón, “a la cuenta de tres, quiero que entres ahí, corras a cubrirte e improvises. Hay que disparar para abrirte paso al elevador, necesitaras que cada disparo cuente.”

Permanecí totalmente quieto por unos instantes, preparando mi mente para lo que venía.

“Uno,” apreté el agarre en mi rifle.

“Dos,” una gota de sudor se deslizo por toda mi cara.

“…tres!” patee las puertas para ver un gran lobby completamente oscuro por unos instantes antes de que corriera a un grueso pilar de concreto para cubrirme. El sonido de las puertas azotándose hicieron eco en todo el salón, pero no había disparos, no había pasos, solo el ruido de las puertas repitiéndose cada vez con menor intensidad. Cuidadosamente asomé un ojo y no vi señales de vida, el espacioso lobby estaba completamente desierto.

“Debe ser mi dia de suerte,” deslicé mi rifle hacia mi espalda y observé mis alrededores con más cuidado con un sentimiento de alivio. No parecía que debía haber gente alrededor, pues el piso estaba cubierto de polvo y varios cables corrían hacia un gigantesco hoyo en el suelo, provenientes de las paredes, con dirección al techo.

“Quizás pueda meterme por este ducto…” mire abajo hacia el ducto con cuidado. Giré mi cabeza al escuchar voces en la distancia y velozmente corrí a cubrirme tras un ducto metálico de ventilación que reptaba por el suelo. Desde donde estaba, pude ver a dos hombres salir de un viejo elevador de mantenimiento vestidos exactamente igual que los guardias de afuera. Cambie a mi rifle y los enfoqué con la mira telescópica, a un lado de su hombro izquierdo se veía la águila, el globo y el ancla. El cuerpo de Marines de los Estados Unidos estaba aquí.

“¿Crees que Richards se haya perdido otra vez?” uno de ellos dijo con un particular acento afro-americano.

“No responde su radio pero la puerta está abierta. A lo mejor está perdido por aquí el idiota.”

Espere por el momento preciso para abrir fuego, mis manos casi temblaban con ansiedad. Cuando pararon junto a las puertas por alguna razón, era el momento indicado. Le dispare cinco rondas de 5.56 x 45mm en todo el cuerpo de uno, matándolo instantáneamente y dos más en las piernas del otro. Cayó al suelo quejándose de dolor mientras sacaba una pistola de su chaleco.

“¡¿Quién carajos anda ahí?!” gritó con terror en su voz, apuntando a todos lados de manera paranoica. El eco del lugar confundió la dirección del disparo, lo que me permitió acercarme con cuidado cubriéndome con la oscuridad para tener un tiro limpio hacia su pistola. Con un solo disparo, su arma salió volando por los aires mientras me acercaba apuntando mi rifle a su cabeza.

“No te muevas,” dije con calma hundiendo el cañón de mi arma en su frente.

“No dispares hermano, tranquilo. Ya me tienes, me atrapaste, déjame ir,” cerro sus ojos aterrorizado, temblando del miedo. Aleje mi arma lejos de su cabeza lentamente.

“Escúchame, amigo, tendrás que responder unas preguntas si quieres arrastrar tu herido y cobarde trasero lejos de aquí. ¿Qué hacen los Marines aquí?”

“Nos enviaron a asegurar las instalaciones de ponificación, es todo lo que se.”

“¿Dónde están los rusos?”

“El teniente Cavanaugh los envio al sótano, los tenemos de rehenes.”

“¿Cavanaugh? ¿Que no tu superior de llama Bradley?”

“Se llama Bradley Cavanaugh, no me mates por favor.”

“¡¿Dices que los tienen de rehenes?! ¿Qué carajos esta pasa aquí?, ¿Cuál es el punto de asegurar estas instalaciones?”

“Ya te dije, solo sé que nos enviaron aquí para ocupar las instalaciones, el Teniente Cavanaugh debería saber más. Solo déjame ir por favor,” cerró sus ojos otra vez, conteniendo sus masculinas lagrimas tras sus parpados.

“Una última cosa. ¿Cuántos de ustedes hay ahí abajo? ¿Necesito alguna identificación para pasar?” le arremetí con el cañón de mi rifle una vez más, hacer chillar a este hombre como una niña me resultaba bastante entretenido.

“No, pero necesitaras una tarjeta para entrar al cuarto de control, ten, toma la mía,” saco una pequeña tarjeta amarilla con algunos garabatos en ruso, “y debería haber al menos otros ocho adentro, con suerte todos estarán dentro del cuarto para cuando bajes. Ahora, por el amor de dios, déjame ir…”

“Dame tu radio y te dejare arrastrarte a una esquina oscura,” quite mi rifle de su rostro y me aventó su radio, tratando de incorporarse usando su pierna menos lastimada. Sus esfuerzos eran inútiles, pues le había disparado en ambas piernas. Se arrastró hasta la salida con dirección a un jeep.

“Y pensé que los marines eran rudos…” dije con un profundo suspiro de alivio, volteando a ver al elevador en una lejana esquina. Inspeccione el cuerpo del otro marine para adquirir más munición. Los cartuchos de treinta balas eran lo suficientemente pequeños como para que dos cupieran en mis bolsillos.

Me dirigí al oxidado elevador de servicio, que consistía de una rudimentaria plataforma metálica jalada por unos cables automatizados, y presione el botón con la flecha hacia abajo. Lentamente, el elevador comenzó a descender hacia la oscuridad, teniendo como única fuente de iluminación una pequeña lámpara sobre la consola de mando frente a mí.

Tras unos minutos de bajar, el elevador se detuvo en un pasillo con paredes plateadas brillantes. Descendí con cautela y equipé mi confiable P229. El piso de mármol blanco solo ayudaba a rebotar las brillantes luces de arriba y las paredes estaban lo suficientemente pulidas para ver mi aspecto en ellas. Lo primero que note en mi aspecto era la falta de mis prominente entradas en la cabeza, ¿podría ser qué los viajes a Equestria me habían rejuvenecido?

“Te ves bien…” pensé con una sonrisa, contemplando mi aspecto en las paredes. Una vez que acabé de contemplarme, camine por el pasillo hasta topar con una intersección. Me recargue en un lado de la pared y salí de la intersección apuntando mi arma hacia ambos lados en rápida sucesión. Y del lado izquierdo ahí estaba, una puerta de vidrio polarizado con una cerradura electrónica a unos cuantos metros a mano derecha.

“Parece que los marines no mentían. Aún tengo un par de minutos antes de que se den cuenta mate a unos cuantos de los suyos, debería usar esos minutos para encontrar a los Rusos y asegurar que estén a salvo.” Pensé rápidamente, evitando que usara la tarjeta en la consola. Me di media vuelta y caminé por el pasillo en la dirección opuesta al cuarto de mando. El lugar era un laberinto para alguien que no sabe ruso, por lo que me perdí tras un par de vueltas. Tras un par de minutos de vagar por las instalaciones, me topé con una puerta marcada con una nota muy peculiar.

“Científicos Rusos Locos.”

“Interesante…” mire con ganas de reír, notando que esta puerta también necesitaba una tarjeta para abrirse. Deslicé la puerta y un breve sonido confirmo su apertura. Entre para ver unas escaleras descender hacia una pequeña bodega, en donde había al menos diez hombres en bata blanca atados en el centro del cuarto, rodeados de varias cajas de cartón.

“¿Están bien?” pregunté a distancia, esperando una respuesta ininteligible.

“No eres americano, ¿verdad?” uno de ellos respondió con un clásico acento ruso, parecía ser el más viejo del grupo por el dominante color gris de cabello y abundante barba.

“No, no lo soy. Celestia me envio a revisar la situación, ¿qué ha pasado?” redoble mi paso para alcanzarlos.

“Los americanos entraron a la fuerza ayer en la noche, matando a varios de nosotros. Dicen que los Estados Unidos ahora están en control de las instalaciones, un montón de basura,” el nudo en sus ataduras no era rival para la bayoneta del rifle. Uno a uno, les fui liberando y se incorporaron, hablando entre ellos en ruso.

“¿Sabes por qué querrían estas instalaciones?”

“Quieren información para la construcción de un portal más grande hacia Equestria, creo que planean una invasión al mundo de los ponies.”

“¿Les ayudaste?”

“¡Por supuesto que no! No traicionaría la confianza que Celestia nos dio. Les dije que me besaran el zadnitsa, nos pusieron aquí abajo y nos ataron como animales.”

“Muy bien, voy a necesitar que se queden aquí otro rato. Voy a limpiar el edificio de marines,” le pase el rifle a este viejo doctor.

“Pero joven, no puedo disparar esta cosa,” contemplo el arma con desasosiego.

“Solo jale el gatillo si es que vienen aquí. Con suerte no tendrás que usarla,” corrí hacia las escaleras apresurado, no me quedaba mucho tiempo.

“Muy bien joven, ¿Cuál es tu nombre?”

“Leighton McRae, y si me disculpas, debo purgar este edificio,” subí las escaleras con prisa y saqué mi P229.


Notas:

-Uno de los capitulos mas cargados de accion, pero... se queda peque... se queda peque...
-Aqui sigue la imagen de Leighton, pero no tengo ni la menor idea de como subirla (denme un LOL!), pero ya esta listiiiiiiisima.
-La continuacion de este es uno de los maaas largos, preparense para leer mucho la proxima vez!
-Con el video que puso soul me gustan aun mas los waffles

Gracias por leer mi trabajo :)
 
Top
K~P
view post Posted on 3/8/2011, 00:53     +1   -1




Bravo, ¡BRAVO!

Excelente el Fic, me encanta *-* Lo llevo siguiendo desde que posteaste el primer capítulo y enserio me encanta *^*
No pude dejar pasar la referencia al juego "CoD: Black Ops" por el nombre de Mason en el primer capítulo (No se si fue casualidad o hiciste una referencia xD)
Espero con ganas los siguientes capítulos, cada vez son más interesantes.

AWESOME FIC /)^3^(\

Tuve que salir de mi "exilio" para hacer este post(Como diría Soul) Era necesario comentar el Fic xD
 
Top
view post Posted on 3/8/2011, 03:57     +1   -1

Estudiante de Celestia

Group:
Artistas Pony
Posts:
649
Reputation:
0

Status:


QUOTE (K~P @ 2/8/2011, 16:53) 
Bravo, ¡BRAVO!

Excelente el Fic, me encanta *-* Lo llevo siguiendo desde que posteaste el primer capítulo y enserio me encanta *^*
No pude dejar pasar la referencia al juego "CoD: Black Ops" por el nombre de Mason en el primer capítulo (No se si fue casualidad o hiciste una referencia xD)
Espero con ganas los siguientes capítulos, cada vez son más interesantes.

AWESOME FIC /)^3^(\

Tuve que salir de mi "exilio" para hacer este post(Como diría Soul) Era necesario comentar el Fic xD

Omg! Volviste! = D

*estrujacion* (?)

Y seh... eso diria yo... XD
 
Top
Paxncho
view post Posted on 3/8/2011, 16:43     +1   -1




Como Fucking lo haces? .-.
Cada capitulo que pasa lo unico que deseo es que siga y siga °¬°


QUOTE
“¿LH7? Debí haber pedido 007,”

Mi nombre es McRae.... Leighton McRae (?)
ok no xD
 
Top
Dr.Fluttershai
view post Posted on 3/8/2011, 17:09     +1   -1




Mi opinion sigue igual, esto es interesante y adictivo...me rei con lo de "
Debí haber pedido 007"

Bueno, no tengo mucho que decir, sobre la imagen pues no conosco muy bien, puedes ponerla en un "image hosting", cuando la subas te dan los codigos para compartirla, y lo pones en HTML...bueno es lo que hago yo, aun asi creo que existen mejores formas de subirlo...asi que no me hagas caso del todo :Right?:

Bueno, esperando el siguiente capitulo
 
Top
RoflLuxRay
view post Posted on 3/8/2011, 22:41     +1   -1




QUOTE
No pude dejar pasar la referencia al juego "CoD: Black Ops" por el nombre de Mason en el primer capítulo (No se si fue casualidad o hiciste una referencia xD)

=0 No esperaba la fueran a reconocer, y tambien hay varias referencias mas a Mass Effect por ahi regadas...

QUOTE
Mi nombre es McRae.... Leighton McRae (?)
ok no xD

QUOTE
Mi opinion sigue igual, esto es interesante y adictivo...me rei con lo de "
Debí haber pedido 007"

Si no podia dejar pasar el referirme al famoso agente britanico, no pasa de una simple referencia/coincidencia en el fic xD

Bueno, gracias a todos por leer el capitulo anterior y les traigo el 8 para que lo lean.

Y sin mas preambulos...

Capitulo 8

SPOILER (click to view)
Salí al pasillo nuevamente, cerrando la puerta electrónicamente detrás de mí para no dejar evidencia de que estuve ahí. Las instalaciones aún parecían desiertas, no había un solo ruido ajeno a los que yo provocaba. Caminando por los pasillos, llegué a una intersección como muchas alrededor, pero justo cuando avancé para cruzar esta, tuve un mal presentimiento.

“Quieto,” sentí un pedazo de metal frio en mi sien.

“Finalmente, empezaba a sentirme solo,” levanté mis manos con una sonrisa de confianza bien dibujada, viendo solo de reojo al Marine con casco que me apuntaba con su .45 MEUSOC.

“Me llevaré eso,” me arrebato la P229 de mis manos, “ahora, ¿me dices quien eres y qué carajo haces aquí?”

“No puedo decírtelo,” solté una risa burlona.

“No te hagas el listo,” me golpeo con la culata de su pistola en la espalda, el impacto fue tan fuerte que me tiró al suelo, “¡camina!” con la pistola siempre presente en mi cuello, me hizo caminar hasta el cuarto de control en silencio.

“¡Lincecum! ¡Ábreme!” la puerta de vidrio polarizado se deslizó y otro marine apareció, este tenía ojos cafés comunes y pelo negro, pero se distinguía por una cicatriz que le atravesaba la cara desde la frente a la mejilla izquierda.

“¿Quién es este tipo?” Lincecum retrocedió y nos dejo entrar al cuarto.

“No me quiere decir, lo encontré husmeando por los pasillos con una pistola,” me arrojó contra un montón de monitores en la parte izquierda del cuarto, el impacto me debilitó bastante, lo suficiente para quedar de rodillas en el suelo. Alcé la mirada para ver un cuarto con una gigantesca mesa rectangular en el centro, en ella había todo tipo de proyecciones holográficas y al menos seis marines estaban parados alrededor, todos me veían con odio. Detrás de ellos había varios monitores que mostraban parámetros, para mí, incomprensibles, pues todo estaba en ruso. En manchones de pared que resaltaban por la ausencia de computadoras, se veía un color azul marino parecido a la piel de la Princesa Luna.

En el lado más lejano del cuarto, un marine con una barba de candado me miraba fijamente con más odio que los demás.

“¿Qué es esto, Vásquez?” este hombre preguntó con una voz grave.

“Encontré a este hombre vagando por los pasillos afuera armado con una P229, señor,” Vásquez arrojó la pistola hacia la mesa.

“¿Una P229? Tráiganlo aquí,” dos marines rápidamente me levantaron del suelo y me arrastraron sin que opusiera resistencia hacia este hombre, cuya identidad probablemente era Bradley Cavanaugh.

“Esperaba que mas lucha de el hombre que ya mató cuatro de mis hombres, ¿Por qué cooperas tanto?” los marines me pusieron frente a él, me tenían agarrado de las manos firmemente.

“No estoy cooperando, solo no me resisto, eso es todo,” mantuve mi rostro inexpresivo y mi tono calmado, era la mejor opción para esta situación.

“Vaya acento, es obvio que los rusos no te enviaron, ¿Quién lo hizo?”

“Mira amigo, solo responderé a tres de tu preguntas, después tu respondes todas las mías,” dije con una sonrisa malvada y este gesto no pareció agradarle. Me golpeo fuertemente en el rostro tratando de borrar mi sonrisa, pero solo consiguió darme aliento para mantenerla. Al verme diezmado por el impacto, uno de los dos marines que me sostenían retrocedió.

“En serio crees que puedes escapar de-”

“Sí, te quedan dos,” me acertó un fuerte puñetazo en el estomago, sentí el aire escapar mi tórax y como la respiración se hacía más difícil, pero tenía que resistir.

“Muy bien, jugaré tu pequeña charada,” me tomó del pelo y acerco su rostro al mío, pude sentir su aliento directo en mi cara, mis fosas nasales no pudieron evitar el reconocer el olor a tabaco que emanaba de su boca, “¿Quién te envio y quién demonios eres?”

“Soy Leighton McRae y me envio la Reina Celestia. Se acabó el juego,” sin dudarlo, escupí una prominente flema directo a sus ojos mientras patee la entrepierna del marine atrás de mi. Giré mi cuerpo y tomé mi P229 de la mesa, ejecutando al marine con un tiro en la cabeza.

“¡Maten a este hijo de puta!” Cavanaugh gritó con furia, toqueteando sus alrededores buscando cobertura, pues unos segundos después todos los marines dispararon hacia mi posición.

“Te dije debías atarlo,” escuché a uno de los marines comentar con tono sarcástico desde el otro lado del cuarto. Me agaché bajo la mesa electrónica para cubrirme y esperar que vaciaran sus cargadores.

“¡Cúbranme!” un valiente marine salió de cobertura para correr hacia donde me escondía. Sin salir de mi agazape, apunté mi arma en dirección de la voz y dispare un par de veces. Un ligero suspiro se escucho antes de que el marine cayera al suelo con dos tiros al corazón, era mi dia de suerte.

La muerte paralizó a unos cuantos marines, haciendo que cesaran fuego pues pensaron le habían dado a su compañero. Era momento de contraatacar, y sin pensarlo dos veces me incorporé con mi pistola preparada para ver a cinco marines colocados alrededor del cuarto en manera estratégica.

“Dispararles a todos es imposible,” pensé instantáneamente, tratando de escoger a cual dispararle primero.

“¡Granada cegadora!” uno de ellos advirtió arrojando un pequeño cilindro metálico de color negro hacia mí, cerré mis ojos y dispare sin pensarlo. Era fácil saber que mi disparo había sido certero, pues un ruido estremecedor acompañado de un gran destello de luz llenó el cuarto por completo. El balance en mi cuerpo se vio severamente afectado, pero no tanto como los marines a quienes les exploto la granada más cerca y no cerraron los ojos.

“Ahora o nunca,” comencé a dispararle a los aturdidos marines que salieron de cobertura sin la menor idea de lo que les había golpeado, sus cuerpos cayeron abatidos uno a uno por un disparo en la cabeza o al corazón. No perdone a una sola alma excepto al teniente.

“Ahora, te toca responder mis preguntas como estaba establecido,” apunté mi pistola a su frente justo cuando acababa de limpiarse el escupitajo, un gritó se ahogo en su garganta cuando reconoció mi arma frente a él.

“Vete a la mierda,” respondió con indignación.

“Te dejare pensándolo otro rato,” concentre toda la furia que guarde con cada golpe que me dio en un solo culatazo, haciéndolo perder la conciencia.

“Supongo esto completa mi misión,” caminé hacia la computadora y suspiré de alivio, pues mi aseveración era verdadera.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------

“Te debemos la vida, Leighton,” el viejo doctor dijo aliviado. Después de noquear a Cavanaugh bajé a liberar a los científicos rusos, quienes celebraron con alegría la muerte de los marines y la recuperación de sus puestos de trabajo. Entre todos limpiaron el cuarto de mando, de cadáveres y sangre; al parecer los rusos hacían más cosas aparte de mandar gente a Equestria. Tras dejar a Cavanaugh en la bodega donde los encerraron, y poner un letrero que decía ‘soldado americano loco’, acudí al llamado del viejo doctor, quien por cierto no me había dicho su nombre.

“No hay problema,” le di un apretón de manos con una sonrisa honesta, “y dígame, ¿Cómo hago que este lugar vuelva a funcionar?”

“El generador principal debería estar intacto, en unos momentos deberíamos restablecer comunicaciones con Equestria,” presionó un botón de gran tamaño a un lado de la mesa y todas las proyecciones se concentraron en un gran globo terráqueo con una barra de carga abajo.

“Seer, my snova onlîne,” un científico habló en ruso desde el otro lado de la mesa unos momentos antes de que la barra de carga se llenara súbitamente.

“Grandioso, Nikolai nos acaba de decir estamos en línea otra vez, intentare comunicarme con los ponies…” comenzó a teclear a una velocidad inhumana en un panel holográfico naranja frente a él, las ventanas aparecían y desaparecían rápidamente sin que pudiera entender algo.

“Esta es la estación de comunicación de Equestria, por favor Dulce Sorpresa, dime que son ustedes,” una voz masculina se escuchó en los altavoces del cuarto.

“Aquí Dulce Sorpresa, Equestria. Informen a la Reina Celestia que la misión de su agente fue todo un éxito, estamos a salvo,” el doctor simplemente dirigió su voz a las proyecciones holográficas, su tecnología era impresionante.

“Entendido, Dulce Sorpresa. Aquí tenemos a Twilight Sparkle, ella quiere hablar con LH7.”

“¿Twilight?” acerqué mi rostro a la proyección, imitando las acciones del doctor.

“¿Leighton? ¿Estás bien?” claramente era la voz que me hablaba hace un rato, la voz de Twilight.

“Solo unos cuantos moretones y rasguños, pero sigo vivo, ¿tú qué tal?” dije con una gran sonrisa. Escuchar una voz amigable después de momentos de tanto estrés me venía muy bien.

“Me da gusto que estés bien, ahora dame tu reporte,” a pesar de que lo estaba haciendo por pura formalidad, estaba seguro que ella quería seguirme la corriente y dejar de lado el reporte por un momento

“Misión cumplida, resolví la causa de la falla en las comunicaciones y restablecí a los rusos en sus puestos. Las instalaciones fueron ocupadas por un equipo del cuerpo de Marines de los estados unidos, alegando tenían control sobre las instalaciones.”

“¿Erradicaste toda presencia americana?”

“Negativo, capture a su líder, el Teniente Bradley Cavanaugh. El resto de su escuadrón murió en acción.”

“¿La cuenta de bajas es superior a diez?”

“No, solo mate nueve Marines,” reí sarcásticamente mientras ella suspiraba algo decepcionada.

“Tenias que matarlos a todos, ¿verdad…? Bueno, al menos la cuenta no pasa de diez, y Celestia no quería más de esos, por lo que debería quedar satisfecha con tu rendimiento.”

“Genial, ¿cuál es mi siguiente misión?” pregunté emocionado.

“Te necesitamos de vuelta por aquí, ya hiciste bastante por hoy y Celestia quiere que descanses unos días. Mi conferencia en la ONU se reprogramó por una supuesta reunión de emergencia, tu sabes necesitan reorganizarse cada que tiran una bomba en alguna ciudad grande. Aunque si quieres puedes quedarte en la tierra.”

“Úntenme mantequilla y llámenme bizcocho,” dije con una sonrisa, “claro que no me quedo por aquí, mándenme de vuelta para allá, solo asegúrate de que siga siendo yo cuando llegue.”

“Muy bien. Doctor Lukashenko, mándalo de vuelta junto con el soldado capturado. Hablaremos con él cuando llegue.”

“Enseguida, señorita,” Lukashenko presionó un botón y la comunicación se termino.

“¿Cómo ponificas al viejo estilo ruso?” froté mis manos con ansiedad.

“Es un proceso algo complejo. Hey, Nikolai! Voz’mite yego vkomuntu transporta.”

“Horosho, •eer, sleduĭte za mnoĭ gospodin Leighton,” un científico de pelo café corto me señalo lo siguiera. Guardo silencio total al caminar por los pasillos del lugar, llevándome a un cuarto protegido por un par de puertas blindadas, cerrado electrónicamente con tarjeta y contraseña numérica de bastantes números.

Las puertas liberaron presión y comenzaron a abrirse lentamente, revelando un gran cuarto con una estructura parecida a un tazón de metal pegado a la pared del fondo, con varios cables que salían de servidores alrededor y se conectaban a la parte trasera del tazón. Unos cuantos escalones separaban al tazón del resto del suelo, y las luces de los servidores eran la única fuente de luz en el cuarto.

“Espere aquí, señor Leighton,” dijo Nikolai con un acento ruso muy marcado, su español era muy forzado. Acentos como el suyo eran la viva prueba del cliché americano de la voz rusa. Se dio media vuelta y abandonó el cuarto con algo de prisa.

Mirando de cerca mis alrededores, noté una pequeña consola con letras legibles junto al gigantesco pedazo de metal pegado a la pared.

“Supongo puedo husmear un rato…” corrí hacia la consola, husmeando entre los menús que aparecían frente a mí. Hubo uno en particular que llamó mi atención.

“Parece que si tienen bien vigilado quien entra a Equestria…” revisé una larga lista de nombres ordenados alfabéticamente.

“No creo que…” toqué mi mentón meditando, “pero…” mis manos se movieron casi por si solas tecleando una palabra que tengo memorizada. Mi apellido. Para mi sorpresa, dos archivos muy especiales salieron de la búsqueda.

“Angélica McRae. Estatus: Viva. Transferida al refugio en Fillydelphia. Nombre de Pony: Clasificado. Perfil: Cambio cultural regular, el sujeto no exhibe recuerdo alguno de su vida, pero no reconoce a su hija como tal.

Parientes: Diana Blair McRae, hija.

Situación actual: Se perdió su rastro cuando salió de Fillydelphia, su localización actual es desconocida.

Diana Blair McRae. Estatus; Viva. Transferida al refugio en Fillydelphia. Nombre de Pony; Clasificado. Perfil: No hubo necesidad de cambiar al perfil cultural por su corta edad. No reconoce a su madre como tal.

Parientes: Angélica McRae, madre.

Situación actual: Se perdió su rastro cuando salió de Fillydelphia, su localización actual es desconocida,” recité en voz alta de manera mecánica.

“Señor Leighton,” Nikolai dijo con el ceño bien fruncido, había regresado acompañado de otro científico arrastrando el cuerpo del desmayado teniente Cavanaugh. Cerré todas las ventanas de la maquina y me alejé de ella con una sonrisa nerviosa.

“¿Está todo listo?” colocaron el cuerpo de Cavanaugh junto a mí en la estructura metálica.

“Así es, permanezca quieto en el portal. La ponificación comenzará en unos instantes,” se acercó a la consola y comenzó a teclear algo a una velocidad cercana a la de su superior. La electricidad comenzó a fluir hacia el portal, sentí el aire más pesado y mi cuerpo adormecerse.

Mientras toda sensación abandonaba mi cuerpo, alcancé a sentir que era succionado hacia un vacio en el que todo era oscuro, recobré el tacto en mi cuerpo cuando un rayó me pego de lleno en el pecho. El dolor comenzó a desvanecerse de poco a poco, y nuevamente perdí la conciencia en medio del proceso.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------

Me desperté de golpe al sentir que mi cabeza era electrocutada, abriendo los ojos ampliamente para reconocer a Twilight Sparkle frente a mí.

“¿Leighton? ¿Recuerdas quien eres?” preguntó con preocupación.

“Recuerdo que las últimas dos veces que hice esto mi cabeza no se sentía como un melón partido a la mitad,” me incorpore con un pequeño gemido de dolor, sobando mi cabeza con un casco.

“Tomare eso como un sí, bienvenido de vuelta.”

“¿Estoy en tu casa?” pregunté tan pronto como reconocí las paredes repletas de libros, características de la casa barra biblioteca en la que ella habitaba.

“De hecho apareciste en el portal de Canterlot, pero te traje aquí,” dijo con una linda sonrisa.

“¿Y Cavanaugh?”

“Su interrogatorio en Canterlot ya debería haber terminado. Se supone que Spike me dará las noticias en unos momentos. Y no te preocupes, borraremos su memoria cuando terminemos y se incorporará a la policía de Manehattan como cualquier otro Pony.”

“Yo lo mandaba de vuelta si fuera tu…” murmuré entre dientes, insatisfecho con la decisión.

“¡Hey Twilight!” se escuchó como la puerta era azotada, era Spike sosteniendo un papel, justo como cuando lo conocí, “ya llegaron los resultados del interrogatorio.”

“Hola Spike.”

“¡Oye, es Leighton! ¡Volviste!” tomó mi pezuña y la agitó, como lo debió haber hecho cuando nos conocimos.

“Y, ¿qué dice la carta? Ábrela,” el obediente dragón siguió las ordenes de su jefa y aclaró su garganta antes de empezar.

“Iré directo a las preguntas…” sus ojos bajaron por todo el texto del papel, “Ok aquí va. ¿Para quién trabajas? ‘Para el cuerpo de Marines de los Estados Unidos. ¿Cuál era el objetivo de su incursión en las Instalaciones de Ponificación Rusas? ‘asegurarla para obtener datos para una potencial invasión militar a Equestria’.”

“Lukashenko tenía razón,” toqué mi mentón meditando.

“¿Para qué serian usados estos datos?-”

“¿Qué clase de pregunta redundante es esa?” pregunté sarcásticamente.

“Aquí dice que usarían los datos para desarrollar una tecnología que permitiría atacar Equestria sin mandar tropas.”

“Basta, Spike,” Twilight interrumpió con indignación, “ya oí suficiente. Mándaselo a Celestia.”

“¡Enviando!” Spike sopló al papel una flama verde y este se desvaneció en una masa de polvo grisáceo que voló por una ventana.

“Estoy seguro que Celestia tendrá una opinión interesante al respecto,” dije mirando a Twilight con algo de preocupación.

“Pues no tendrás que lidiar con ella, me dijo que puedes tomar el fin de semana. Finalmente puedes ayudar a Rarity o Applejack como querías,” comenzó a levitar libros con su magia.

“Así que… ¿me puedo ir?” pregunté escépticamente.

“Si puedes irte a vagar por el pueblo como turista, yo me quedaré aquí revisando unas cosas.”

“Muy bien…” retrocedí aun con escepticismo, acertándole una mirada extraña. Salí de la biblioteca con Spike atrás de mi sin un rumbo fijo en mente, hace apenas veinte minutos estaba disparando en un laboratorio ruso a más de doscientos metros bajo tierra, y ahora podía hacer lo que yo deseara.

“Así que… ¿A dónde vamos?” preguntó con curiosidad el pequeño dragón, iluminando mi mente con un bien destino para comenzar.

“¿Apple Bloom está bien?”

“Bueno, lo último que supe es que estaba en Sweet Apple Acres recuperándose de su ataque; ¿quieres ir a visitarla?”

“Tu llévame,” le dije alegremente. Spike comenzó a correr delante de mí, y rápidamente le alcancé volando, una tarea que ahora me resultaba un poco más fácil, aunque todavía me sentía algo torpe para dar vueltas o descender.

Al final de la calle, los lados se empezaron a llenar de manzanares. A lo lejos, un prominente granero esculpido de manera extraña se asomaba encima de una loma, estábamos entrando a Sweet Apple Acres.

“Eso no es justo, ¡tú puedes volar!” exclamó con tono juguetón. Me arriesgue a dar un giro en el aire y volar de cabeza, al ver que mi truco resulto le mire desde arriba con algo de arrogancia.

“¿Qué tiene? Hace unas horas no las podía utili-” fui interrumpido bruscamente por otro objeto volador que chocó bruscamente contra mí, haciéndome caer al suelo sin control. La caída no fue letal, pero si dolorosa.

“¡Leighton!” Spike corrió a asistirme espantado.

“Estoy bien… estoy bien…” dije sobándome la cabeza, dándome cuenta que el objeto volador no identificado era otro Pegaso, pero más pequeño y de color naranja, su melena era corta y morada.

“¡Scootaloo! ¿A ‘onde crees que vas?” Applejack saltó de entre los árboles, exclamando con enojo. Se veía algo cansada, “¿Pero qué diantres…? ¿Leighton?” corrió hacia mí para ayudarme a incorporarme.

“Estoy bien, revisa al pequeño.”

El pequeño Pegaso gruñó adolorido, parándose lentamente, “¿en dónde estoy?” preguntó confundida.

“Oh… ¿estás bien?” Applejack tomó la cabeza de Scootaloo y la agitó casi violentamente.

“Si sigues sacudiendo su cabeza de esa manera, lo dudo,” dije de manera sarcástica, y ella dejo de sacudirlo. Scootaloo recuperó la completa percepción de sus alrededores en ese momento, pues ya parecía poner más atención.

“Quiero saber que estabas haciendo husmeando en mi casa,” la Pony dijo con tono autoritario, pero con el temple de una madre preocupada.

“Solo quería ver si Apple Bloom estaba bien,” dijo arrepentida de sus acciones, bajando la cabeza.

“¿Y no puedes tocar la puerta y preguntar? No te voy a morder.”

“Lo siento…” la pequeña tragó saliva, conteniendo su llanto. Muy valiente para alguien tan joven.

“No hay problema, puedes entrar a ver a Apple Bloom,” acaricio su cabeza con una cálida sonrisa, “¿y tú qué? Leighton.”

“Esperaba poder ver a Apple Bloom también, si gustas llevarnos,” apunte mi pezuña hacia el camino de manera educada. Ella sonrió y comenzó a caminar hacia su casa.

“Qué lindo detalle el que vengas a ver a Apple Bloom, ella está bien. Ya no le duelen sus heridas y ahora solo reposa en cama hasta que el doctor diga que puede salir,” troté hacia un lado de Applejack, Spike se montó en ella y Scootaloo volaba sobre nuestras cabezas.

“¿Ya ves?, tuve que salir muy apurado y no me pude despedir, me disculpo por mi falta de modales.”

“No te preocupes, hombre. Quien sabe para que te quería Twilight, y la verdad prefiero no saberlo. Ella es la que debería disculparse por su falta de modales.”

“Supongo tienes razón,” dije con una pequeña sonrisa en labios, “de todas maneras, pude haberme despedido y no lo hice.”

“¿Te tomas muy en serio todas las acciones comunes de todos los días?” había un tono de broma en la voz de Spike que hizo no tomara alguna ofensa de su comentario.

“Fui educado para tener modales, en Inglaterra el no mostrarlos es una profunda falta de respeto. Entenderás es algo que traigo desde allá.”

“Claro…” Spike giró sus ojos, tomando mi comentario a la ligera.

“Ya llegamos, Leighton” Applejack dijo con orgullo, “bienvenido a Sweet Apple Acres, casa de los Apple.”

Era claro que había razones para sentirse orgulloso de sus raíces. El granero delante de mí era un poco más alto de lo que pensé al principio, y noté la presencia de algunos sembradíos de maíz junto a él. Alrededor del granero, había manzanares. De hecho había bastantes manzanares por doquier, de ahí el nombre de Acres de Manzanas dulces.

“Spike, aquí te bajas. Cuida a Scootaloo por un momento en lo que llevo a Leighton a ver a Apple Bloom,” se sacudió al dragón con un solo movimiento de cadera.

“Pero…” Scootaloo protestó

“Pero nada, es tu castigo por no avisarme. Spike, cuídale,” él asintió la cabeza obedientemente, sentándose en una cerca junto a un sembradío. Applejack caminó hacia su casa, señalando que la siguiera.

“Estoy muy agradecida que estuvieras ahí para salvar a Apple Bloom. Escuché que el grifo ya está siendo procesado en Manehattan,” dijo agradecida, abriendo la puerta de madera de su hogar. Al parecer estaba sola, pues no había nadie adentro de la adorable casa decorada al viejo estilo tejano, con varias fotografías de rodeos colgadas en las paredes.

“No te fijes, un placer el poder ayudar,” respondí con modestia, acompañándola por un unas escaleras de madera rojas hacia la planta alta de su casa. Al final de las escaleras, giró hacia la derecha por un pasillo iluminado por una ventana al final.

“Ha estado durmiendo por un rato, así que debería estar despierta,” murmuró mientras nos acercábamos a una puerta rosada marcada con las letras A.B. Empujó la puerta con su cabeza gentilmente, haciendo el menor ruido posible. Pero los crujidos del piso de madera nos habían delatado desde que subíamos las escaleras.

“¿Apple Bloom? ¿Ya estas despierta?” preguntó en voz baja. La potranca giro su cuerpo cubierto en sabanas rosas para vernos con una gran sonrisa. Su cabeza estaba cubierta por unas cuantas vendas, y las sabanas que la tapaban no le permitían mucha movilidad.

“¡Leightn’!” Apple Bloom exclamó emocionada al verme.

“¿Estás bien?” pregunté con dulzura en la voz, una dulzura con la que solo le hablaba a mi propia hija.

“Sip, mis hermanos me han estado cuidando y ya me siento mucho mejor, ¡todo gracias a ti!”

“¿Dormiste bien?” preguntó Applejack al acercarse a un lado de su hermana.

“Si, pero aun tengo esos sueños raros.”

“La presencia de pesadillas es ocurrencia común en niños con estrés post-traumático, deberían irse en un par de días, no te preocupes,” asegure acariciando algo de su melena que salía de entre las vendas.

“No son pesadillas. Sueño que estoy caminando en una ciudad y que llamo alguien mami, ¡es algo divertido!” la cara de Applejack cambio de golpe a una de susto, me agarro de la cola y me jaló a una esquina lejana del cuarto para evitar que su hermana escuchara.

“No sabía que soñaba esas cosas. El doctor me dijo que tiene una contusión cerebral,” susurró a mi oído.

“¿Cuántos años tiene?”

“Cumple siete en unos cuantos días.”

“Desordenes del sueño… ¿no padecía de ellos antes del ataque?”

“Un momento, ¿eres un doctor o algo así?” cambio el tema de conversación sorprendida.

“No, pero me sé un par de trucos de psicología, pues hice una tesis en la relación cerebro-social-sensorial humana.”

“No sé de qué diantres me estás hablando pero suena convincente.”

“Seguro que si, ahora dime si ha estado teniendo problemas así antes del ataque.”

“No lo creo, me lo habría mencionado.”

“No me excluyan de sus pláticas, ¡ya estoy grande y quiero oír!” Apple Bloom se quejó alzando la voz en tono de berrinche.

“Muy bien pequeña, Leighton te va a hacer unas preguntas, quiero que seas honesta, ¿de acuerdo?”Applejack caminó hacia su hermana otra vez, acariciándole la frente.

“Muy bien, ¡dispárame!” dijo la pequeña enfáticamente.

“Quiero que me describas que sucede exactamente en tu sueño,” dije parándome al lado de la potranca, el rostro de su hermana era de preocupación.

“En mi sueño estoy en una gran ciudad…” alzó la mirada al techo tratando de recordar algo, “Fillydelphia, estoy en Fillydelphia, lo sé por unos edificios que he visto en fotos. Camino por las calles siguiendo a algún Pony. No lo veo pero solo sé que es mi mama porque le grito así muchas veces.”

“¿Llegas a alcanzar a este Pony?”

“No, ella corre a un edificio de ladrillos rojos y acaba mi sueño, puedes creerlo Applejack, ¡soñé con mama!” dijo emocionada, pero su hermana permanecía angustiada.

“Muy interesante…” Applejack me mordió la cola nuevamente y volvió arrastrarme lejos de la cama de su hermana, quien protestó inmediatamente pidiendo regresara a su lado.

“El que un Pony tenga sueños usualmente significa algo especial, pues rara vez los tenemos,” susurró directo a mi oído.

“¿Y?”

“Si está soñando con nuestra madre entonces sigue viva y está en Fillydelphia.”

“Esa es una aseveración atrevida, ¿Y no conoces a tu madre?” pregunté con escepticismo.

“Mira…” suspiro de manera rápida dada la situación, “es un asunto bastante complejo y no es fácil explicar. Si quieres te explico todo si viajas conmigo a Fillydelphia, pero nos tendríamos que ir hoy.”

“¿Cómo?” la idea de Applejack me sorprendió por completo, mi dia se estaba volviendo cada vez mas contrastante, “¿Vas a tomar una decisión totalmente imprudente basándote en algo que no alcanza ni siquiera el estatus de corazonada?”

“Sí” respondió con gran confianza, “cuando te explique todo seguro entenderás, ¿Vienes o no?”

Su petición era algo completamente repentino, pero su determinación y su mirada reflejaban lo importante que era esto para ella. Y para solo haber estado con ella un par de horas antes y no tener más de un dia de conocerla, confiaba en ella tanto como en Twilight.

“Muy bien, iré contigo.”

“Gracias, ahora ve a decirle a Twilight que voy a tomarte prestado por un par de días, dile que voy con unos tíos y no puedo ir sola,” comenzó a empujarme hacia la salida con su cabeza, los pisos de madera no ayudaban a mis pezuñas para ofrecer resistencia.

“Oye al menos deja me despido de tu hermana,” giré mi cuerpo para salir de su empuje, “¡nos vemos Apple Bloom!”

“No te lo lleves así Applejack, ¡que se quede otro rato!” la potranca gritó en protesta, su voz llegó a un tono capaz de enloquecer a cualquier persona. Applejack terminó de sacarme del cuarto unos instantes después, cerrando la puerta de golpe detrás de ella.

“¿De qué demonios se trata esto?” le pregunte con el ceño bien fruncido, ella puso su pezuña en mis labios, acallando cualquier comentario posterior.

“Mira, voy a tener que fugarme,” dijo con preocupación, “La Abuela Smith no me deja salir muy lejos y Big Macintosh me mataría si se llega a enterar de esto, pero tengo que correr el riesgo. Ve y dile a Twi, te veo en la entrada de la granja a las siete en punto, ¿de acuerdo?” comenzó a encaminarme hacia la salida de su casa con prisa, abajo ya había dos Ponies, un potro grande y fuerte de color rojo y melena rubia un poco más oscura que la de Applejack acompañado de una vieja yegua verde, bastante desgastada por la edad.

“¿Quién es este apuesto jovencito Applejack?” preguntó la anciana con voz tambaleante.

“No es nadie, ya se iba,” respondió bastante nerviosa, casi empujándome por las escaleras.

“Estaré vieja pero no soy tonta, ¿cómo te llamas joven Pegaso?”

“Mi nombre es-”

“Whooves, y es un doctor que Twilight me recomendó para Apple Bloom. Ya hizo su consulta y pasaba a retirarse,” dijo segura de sus palabras, pese a que eran una bola de mentiras. Pude sentir cómo su pezuña se retorcía en su espalda, incitándome a seguirle el juego.

“Así es,” aseguré con mi dote natural de mentir, “La potranca debería recuperarse con los ungüentos que les he dejado.”

“Muchas gracias por su consulta, doctor. ¿Cuánto va a ser?” preguntó el potro rojo, su voz era relajada, calmada. A pesar de su intimidante aspecto no parecía que abusara de él.

“Ya le pagué, Macintosh, no te preocupes,” Applejack continuó empujándome hacia la puerta.

“¡Gracias por todo!” dijo la Pony de avanzada edad momentos antes de que Applejack me sacara por completo de su residencia.

“Ya sabes el plan, yo ahorita me las ingenio para salirme de aquí. ¡Vete!” apuntó hacia la salida de la granja y azotó la puerta de su casa. Toda esta experiencia me demostró que mis asunciones estaban equívocas, los Ponies al parecer si pueden mentir y muy bien.


Notas:

-Largo, ¿verdad?
-A este le metí turbo, la trama avanza rápido y lo preví, pero solo pasan algunas horas.
-Las cosas que dicen los rusos son, en orden de aparicion: "Nikolai, llevatelo al cuarto de transporte," y "si señor, leighton, sigueme".
-Use traduccion de google, pero que diantres si quedo.

Y gracias al Dr.Fluttershai por señalar comoo hacer lo de la imagen de Leighton, se las dejo abajito!

SPOILER (click to view)
leightonstd


Gracias por el tiempo leyendo mi trabajo!
 
Top
Paxncho
view post Posted on 3/8/2011, 23:09     +1   -1




Ok, este si fue largo y avanzo montones ._.

Pero me gusto mucho mas, de hecho, tu fic es tan exitante que me orgasmeo con cada palabra (????)
Ok, eso olvidalo .-.
XD


Es increible lo rapido que los vas traduciendo, sobre todo por lo largo que son cada uno de los capiutlos o_o
Pero que bueno que sea asi, de esta manera no me quedo con las ganas

The_Awesome_Face_Background_by_DaPhinoXX
xD
 
Top
RoflLuxRay
view post Posted on 4/8/2011, 03:58     +1   -1




QUOTE
Es increible lo rapido que los vas traduciendo, sobre todo por lo largo que son cada uno de los capiutlos o_o

Pues como no hubo xbox para mi, hay mas historia para poner aqui!!

Capitulo 9

SPOILER (click to view)
“Malditas bolsas pesadas,” me quejé por el peso de las bolsas que Twilight me acababa de prestar para el viaje. Aunque eran pequeñas, fueron construidas para albergar bastantes objetos. Pasé la mayoría del viaje hacia Sweet Apple Acres intentando volar, sin éxito.

“¿Teniendo problemas?” dijo una voz familiar atrás de mí, me voltee para ver a Rarity portando un par de lentes con marco rojo bastante peculiares. Ella, como yo, cargaba bolsas en su espalda, pero no parecía que le impedía caminar con la gracia que tiene.

“Solo me acostumbro a la vida de caballo de carga,” respondí sarcásticamente, riendo en mi mente.

“Un potro de tu clase no debería trabajar tan duro,” soltó una breve carcajada, quizás por mi comentario, “y, ¿Qué haces Leighton? ¿Acaso te diriges a Sweet Apple Acres también?” trotó hacia mi lado.

“Si, se supone ayudaré a Applejack con un asunto privado.”

“Oh, por favor. No hay necesidad de esconder los motivos. Sé que tu y Applejack piensan ir a Fillydelphia, pero no sé él porque.”

“Tiene algo que ver con su madre, decir algo más seria un insulto a su privacidad.”

“Muy interesante, y entiendo la privacidad. No habla mucho de su familia. Cambiando de tema, todos en Ponyville están hablando de ti y como salvaste a Apple Bloom; la manera en la que lo hiciste fue simplemente maravillosa. Hay algunos locos que piensan portas un elemento de la armonía.”

“Me siento halagado,” dije con una sonrisa orgullosa, “¿te importaría contarme más de estos elementos?” Sweet Apple Acres aun quedaba algo lejos de donde estábamos, y siempre desee hablar con Rarity a solas. El distante sol escondiéndose en la distancia pintaba el cielo de color naranja, algunas hojas caían de los arboles alrededor de nosotros, El escenario de una larga y exquisita charla estaba puesto, tenía que aprovechar esta oportunidad.

“Son valores, en esencia. Antiguos cuentos de Ponies cuentan que esos valores tienen mucho poder aquí en Equestria, y lo probé por mi misma cuando vencí a Nightmare Moon cuando conocí a Twilight con el poder de estos elementos Se supone hay seis principales, la risa, la honestidad, lealtad, bondad, generosidad y magia. Pero la Reina dijo hay escondidos en los corazones de los ponies con un espectro más amplio de emociones.”

“¿Venciste a alguien con los poderes de estos elementos?” pregunté dudoso de su relato, el tono de mi pregunta solo le ocasiono risa.

“Si, y es bastante común que la gente no crea en este cuento. Mi elemento es la generosidad, Twilight tiene la magia y Applejack la honestidad. Hay otros tres ponies que no conoces, Pinkie Pie la portadora de la risa, Fluttershy, portadora de la bondad y Rainbow Dash, portadora de la lealtad que también estuvieron involucradas.”

“He oído todos esos nombres excepto el de Pinkie Pie. Asumí los ponies de aquí eran interesantes pero no pensé estuvieran tan llenos de historia y cultura,” dije con algo de emoción en mi voz.

“Seguro que si, ah, y como te decía, se supone hay más elementos regados por ahí. Ciertamente no tan poderosos como los seis principales, pero aun dignos de ser reconocidos. Eh oído a Twilight decir que la tolerancia, el amor y la esperanza ya aparecieron en algún lado de Equestria.”

“¡Precisamente esos son los valores que la humanidad perdió y deben recuperar!”

“Bueno, algunos dicen que el coraje y valor viven dentro de ti. Nadie antes había peleado con un grifo como tu; le mostraste a Ponyville que eres alguien respetable con tus acciones. Si todos los humanos son la mitad del Pony que eres tú, entonces encajaran muy bien aquí,” dijo con una grata sonrisa, quedando callada por unos momentos. Sweet Apple Acres se acercaba cada vez más y más a nosotros, tenía que aprovechar estos momentos al máximo.

“Y ¿Por qué visitas a Applejack?” rompí el silencio con la única pregunta que se me pudo ocurrir, la cual salió algo forzada dada las circunstancias. Ella, sin embargo, no pareció notarlo y me sonrió.

“Mi hermana pequeña me aviso de su viaje, y me llevó un mensaje pidiéndome di podía traerle algunos atuendos para la ocasión.”

“No creo estés haciendo esto gratis.”

“¡Leighton!” exclamo indignada, “como la portadora de la generosidad, me ofende el solo pensar en pedir algo a cambio de mi trabajo.”

“Mil disculpas, lady Rarity. Mi aseveración solo era para informarme, no tenía ni la menor intención de indignarle,” asentí la cabeza pidiendo perdón, una amplia sonrisa se fue dibujando en el rostro del unicornio blanco lentamente.

“Como es de esperarse, su caballerosidad le ha salvado otra vez, Leighton McRae,” pareció que frenó su hablar súbitamente, bajando la cabeza pensativa, “¿Le concederías a este humilde unicornio el honor de acompañarte en una cita tras tu regreso a Ponyville?” preguntó con emoción. No supe hasta ese momento que mis encantos también funcionaban en el mundo de los Ponies, y sin siquiera desearlo.

“Me halaga tu propuesta, Rarity,” mi mente analizó rápidamente la situación, considerando que técnicamente yo seguía casado. Tenía toda la intención de hablar, pero mi cuerpo no respondía, “y será un honor acompañarte en el sitio que tu desees, pues no conozco los restaurantes de por aquí.”

“¡Perfecto!” dio un pequeño salto de alegría, “conozco el lugar perfecto para Ponies de nuestra clase,” uno de sus ademanes acabó apuntando delante de nosotros, donde Applejack esperaba con su carruaje y dos Pegasos, lista para partir.

“Leighton, Rarity, que bueno que llegaron,” corrió hacia nosotros, tomándome de una pezuña y empujándome hacia el carro.

“¿Por qué la prisa, querida?” Rarity pregunto extrañada por la reacción de su amiga.

“Macintosh ya se dio cuenta que no estoy cuidando a Apple Bloom, no tenemos mucho tiempo. Rarity, ¿trajiste lo que te pedí?” me aventó violentamente hacia adentro del carruaje.

“Así es, traje dos vestidos para ti y un traje para-”

“¡Gracias!” con su boca, Applejack le arrebató las bolsas a Rarity, aventándolas directo a mi cara.

“¡Respeto por favor!” dijo Rarity ofendida, sentía le acababan de asaltar.

“Lo siento, pero tenemos que irnos. Chicos, ¡vámonos a Fillydelphia!” terminó su frase con un agudo chiflido y se trepó al carro después, azotando la puerta y escondiéndose bajo la ventana. Los Pegasos sintieron el apuro de Applejack y despegaron de manera violenta. El movimiento del carruaje me hizo perder el equilibrio y choque con la cabeza de la Pony terrestre.

“¿En serio era necesario eso?” pregunte sobando mi cabeza del impacto, mis tímpanos aun zumbaban por la fuerza de la colisión.

“Claro que sí, ya puedo ver a Macintosh hablando con Rarity ahí abajo,” miró por la ventana con cuidado, pese a que ya estábamos a docenas de metros del suelo.

“Pues no tienes que preocuparte más por ellos. ¿Te importaría decirme por qué tuviste que fugarte de tu casa como lo acabas de hacer?” me senté en el cojín rojo a un lado mío. Ella se movió de la ventana y se colocó en el lado opuesto del carruaje, quitándose el sombrero. Su melena rubia se corrió hacia un lado de su cuerpo mientras fijaba sus verdes ojos en mi mirada,

“Mira, Leightn’. Tengo una muy buena razón para correr este riesgo y escaparme a Fillydelphia por unos días… Acaso… ¿sabes lo que es vivir toda tu vida sin conocer a tu mama o papa?” dijo con melancolía, nunca pensé ver a alguien tan fuerte como ella en semejante situación.

“No,” respondí casi instantáneamente, “pero mi esposa también era huérfana. Ojala pudieras conocer a Angélica, ella siempre tenía las palabras correctas para levantarte el ánimo.”

“Entonces ella debió haber sido alguien muy fuerte, he vivido toda mi vida sin siquiera saber sus nombres…” un profundo suspiró tranquilizó su alma, “pero por alguna extraña razón, la Abuela Smith y Macintosh protegen esa información cuan perro a su hueso. No importa cuánto ruegue o llore, no me dicen ni siquiera uno de sus nombres. En momentos así apenas me siento de la familia.”

“Estoy seguro tienen muy buenas razones, no hay necesidad de reprocharles eso,” pensé dos veces antes de continuar mi dialogo, “tu situación me recuera mucho a la de Angélica, su tío también protegía toda información pertinente a sus padres. Ella trabajo tan duro para obtener esa información que me conoció en el intento,” recordé con una sonrisa.

“Estoy segura su historia me hará sentir mejor, así que, ¿Cómo conociste a tu esposa?”

Mi mente se zambulló en las memorias de Angélica, tratando de encontrar el mejor momento para empezar mi relato.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------

Fue un Noviembre frio en Liverpool aquel 2021. Tan solo tenía veinticuatro años por esos tiempos, disfrutaba mi nuevo empleo como reportero en el Liverpool Echo. Recuerdo esa noche en particular por ser especialmente larga, trabajando en mi nota sobre como los pueblos en África desaparecían lentamente. El piso de mi oficina quedo desierto después de que mi buen amigo Jamie se fuera; solo éramos yo y los sonidos de una ciudad cubierta por la oscuridad.

En medio de las cláxones de los carros y ambulancias, escuché pasos avanzando por el cuarto.


“¿Quien anda ahí?” pregunté sin obtener respuesta, concentrando mi atención en la nota y su complejidad moral dentro de mi pequeño cubículo blanco. Con un ritmo constante, esos pasos comenzaron a escucharse más cerca y a sonar con mayor intensidad, creando miedo en mí. Me paré en mi silla para asomarme por sobre el borde de mi cubículo, solo observando una larga fila de cubículos idénticos al que yo habitaba iluminados por la tenue luz de algunas lámparas en el techo.

“¿Quién carajos anda ahí?” pregunté nuevamente con algo de desesperación, aun sin obtener respuesta. Sin embargo, los pasos cesaron y deje de darle importancia, perdiendo mi mente en la nota por al menos otros treinta minutos. Fui sacado de foco nuevamente cuando el sonido de un portazo retumbó en las paredes del edificio, haciendo que me asomara al pasillo de mi cubículo.

“Esto no es gracioso, ¡muéstrate!” mis gritos eran inútiles, y estaba muy asustado para abandonar la falsa seguridad de mi cubículo. Vi una sombra humana moverse en las paredes con algo de claridad, acercándose a un cuarto a unos metros de mi cubículo.

“¿Quién eres? ¡No deberías estar aquí!” recuerdo haber gritado con autoridad, esperando al menos diría que era lo que deseaba. Vi que su cabeza giró hacia mí y comenzó a correr hacia mí. En vez de quedarme a enfrentarle, corrí como una niña pequeña hacia la salida.

“¿A dónde crees que vas?” dijo una voz femenina mientras me tacleaba por la espalda, atándome las manos con una soga. Mi orgullo estaba tan lastimado como mi espalda. Esta mujer me alzó y me llevo al cuarto junto al que estaba parada, el cuarto de archivos. Ese cuarto estaba protegido por una contraseña de cuatro dígitos fácil de recordar pero difícil de descubrir, y precisamente ese dia me la acababan de decir.

“¡Dime el código!” dijo con voz firme, sentí un pedazo de metal frio en mi cuello y cante como ave en primavera.

“Tres, uno, cuatro, uno,” dije con voz aguda por la angustia cerrando los ojos, con la esperanza de que la cosa que sentía en mi espalda no fuera una pistola. Ella tecleo la contraseña y cuando se abrió la puerta me arrojó a un lado, corriendo hacia el cuarto husmeando entre los registros de la computadora que guarda todos los archivos. Sin poderme mover, lo único que pude alcanzar a ver fue una palabra en el monitor: ‘Eiselstein’. Cuando encontró lo que quería en la computadora, se dio la vuelta y comenzó a buscar entre los archivos de periodo frenéticamente, parando de golpe cuando se encontró con lo que buscaba.

“No… no puede ser,” murmuró con tristeza en la voz. Yo estaba intrigado por ello, pese que me atacó brutalmente, me amarró como un puerco y me forzó a ayudarle quebrando mi voluntad y las reglas de mi trabajo. Y fue en ese momento cuando la luz del monitor se alineo con su cara para poderla ver por primera vez. Pelo lacio negro que corría por toda su espalda. Sus ojos verde olivo se llenaron de lágrimas cuando se cayó de rodillas con un pedazo de papel en manos.

“¿Estás bien?” traté de no babear ante su belleza, nunca había visto a alguien tan bella como ella anteriormente. Solo volteó a verme con el ceño fruncido, la fuerza de su mirada me espantó apenas hizo contacto conmigo, “Oye solo quiero ser un buen tipo. ¿Estas bien?”

“No, no estoy bien. ¿Y a ti que te importa?”Dijo con algo de enojo, y no la culpo. La curiosidad de un extraño puede ser muy exasperante, pero déjame decirte, Applejack, que hay tiempos en la vida en los que la mejor persona con la cual puedes platicar es un simple extraño, o el hombre que acababas de atacar hace unos minutos en este caso.

“Me importa porque a cualquier persona con algo de humanidad le importaría. Ya sé que me acabas de conocer, que diablos, me atacaste y me ataste como un maldito animal aquí pero no me importa. Parece que necesitas alguien con quien platicar y estoy dispuesto a escucharte,” me miró como si estuviera loco, una mirada a la cual me acabaría acostumbrando.

“¿Como sé que no estás haciendo esto porque soy una chica y te gusto?" Ella siempre fue buena analizándome, tenía esa habilidad de saber las verdaderas intenciones detrás de las acciones de la gente. Pero yo siempre eh sido bueno escondiendo mis intenciones, incluso de ella.

“No me gustan las chicas que entran a mi oficina, me atacan y me atan cuan vil cerdo. Lo siento querida, no eres mi tipo.”

“¿En serio?” dijo con voz arrogante, “pues no te emociones, porque no me gustan los tipos que gritan como niñas cuando los tacleas,” los dos reímos por un instante, yo estaba bastante cómodo tirado en el suelo hablando con ella.

“Me llamo Leighton, Leighton McRae, trabajo aquí como reportero. ¿Cuál es tu nombre?” pregunté con una gran sonrisa en mi rostro.

“Soy Angie,” se limpio algunas lagrimas mientras miraba el papel que tenía en manos.

“¿Asumo tu apellido es Eiselstein?”

“Si, ¿cómo carajo supiste eso?” preguntó completamente sorprendida, me retorcí como gusano para apuntar a la computadora detrás de ella.

“Vi lo que escribiste en la computadora y seguí la conclusión más lógica.”

“Si… debe haber sido así,” se volteo otra vez hacia el papel y se soltó en lagrimas con solo leer unas cuantas líneas.

“¿Qué sucede?” me arrastré hacia su lado. Mi camisa ya parecía que había pasado por todo el lodo de Londres y lo sabía. Pero en ese momento no me podía importar un supremo pepino.

“Yo…” podía ver como luchaba contra la voz dentro de ella que le impedía abrirse conmigo, “vine para saber qué pasó con mis padres.”

“¿Y en serio era necesario que me atacaras?” río por un momento, interrumpiendo su llanto.

“¿Habrías cooperado conmigo si hubiera entrado en la noche y te hubiera preguntado si me dejabas entrar?”

“Pudiste haber preguntado…” dije de manera sarcástica y ella volvió a sonreír. Cuando alguien está atravesando por un momento difícil, siempre es bueno hacerlo reír. Pero no con chistes estúpidos o comentarios tontos. Se trata de encontrar el momento adecuado y las palabras correctas, la sinergia de estas situaciones nos permite abrir los corazones de otras personas. Ella decidió desatarme tras mi último comentario. Pude haber corrido hacia la salida o presionar la alarma como cualquier buen empleado, pero me quede con ella como cualquier buena persona.

“Ahora si dime, ¿Cuál es el problema?” me senté en el piso junto a ella y me miro con esos ojos cristalinos que jamás podré olvidar. Me contó su historia completa. Como había estado viviendo con si tío desde que tenía memoria, que tan fuerte era el deseo de saber que fue lo que les paso a sus padres. Como ese mismo deseo la llevo hasta mi oficina solo con escuchar sus padres habían muerto en Liverpool, cuánto tiempo le tomo ahorrar el dinero para viajar de Glasgow a Liverpool, y como planeaba quedarse hasta dar con la verdad.

Sus padres habían muerto en un brutal accidente automovilístico unos meses después de su nacimiento, nadie podía soportar noticia tan horrible y vivir conociendo a tus padres solo por una imagen de sus ensangrentados cadáveres entre el metal retorcido de un pequeño sedan. En solo una noche acabe conociéndola más que cualquier otra persona antes, y no estoy poniendo palabras en su boca.

Angélica había pasado su vida hablando con pocas personas, no mostrándole su verdadera persona a sus amistades más cercanas o aquellas personas que se había atrevido a besar pero no a amar. Me sentí halagado y abrumado a la vez, nunca había visto a alguien abrirse de una manera tan honesta y pura como ella. Cuando nos dimos cuenta, nos cayeron las cuatro de la mañana, y me ofrecí a llevarla a su casa, donde platicamos por varias horas más.

Sentí la necesidad de compartir con ella todos mis sueños y secretos, y ella los recibió con el respeto que se merecían. En menos de veinticuatro horas, sentíamos que hacía años que nos conocíamos.

Aunque nuestra primera impresión fue de personas que se repudian, nos enamoramos al cabo de unos meses de vernos con frecuencia después de que encontró trabajo dando clases de biología en una escuela cerca de mi trabajo.

Ella decía que el conocerme fue la mejor cosa que le había pasado, solía repetírmelo de vez en cuando cada que recordaba esa oscura noche en la que nos conocimos en un oscuro cuarto lleno de periódicos de todos los años. ¿Quién pensaría que la misma noche que descubrió la suerte de sus padres conocería al amor de su vida?

Ten cuidado con lo que desean, dicen por ahí. Recuerdo que ella honraba a sus padres cada cuatro de abril. El conocer la muerte de sus padres le cambio la vida en muchos aspectos, algunos para bien algunos para mal. Su compañía se volvió parte de mi vida cotidiana, y no podía hartarme de hacernos bromas y disfrutar el sentimiento que me envolvía con solo verla. Y era mi presencia lo que le daba fuerzas para seguir adelante, para levantarse cada mañana para perseguir los sueños que a mi lado encontró.

Nos casamos después de un par de años de novios, recuerdo imprimí una página del periódico con el titular con las palabras ‘¿te casarías conmigo?’ solo para la ocasión. Ella dio el sí soltándose en lágrimas en mis brazos.

Ella siempre se mostró fuerte para todos, solo mostrando su lado débil a mí. Sabía que no le haría daño de alguna forma, y reafirmé mi compromiso en una humilde ceremonia en una pequeña capilla en mi pueblo natal, Knowsley. Nuestra luna de miel fue un viaje por toda América, desde Alaska hasta Tierra del Fuego.

Con la neofagia esparciéndose por todo el mundo, procrear resultó una tarea frustrante para cualquier pareja, pero después de siete años de intentos sin frutos, fuimos bendecidos con una niña que nombramos tras nuestras abuelas.


-------------------------------------------------------------------------------------------------------

“Verás, Applejack, mi esposa era una persona muy fuerte, y bastante afortunada de conocerme aquella noche. No desprecies a tu familia por protegerte de una verdad que, no solo puede destruir tu vida, sino la vida de Apple Bloom también,” voltee mi mirada lejos del nublado anochecer que se asomaba por la ventana y vi a Applejack tratando de esconder sus lagrimas tras una pezuña.

“Gracias por el consejo… pero quiero hacer esto de todas maneras. Y… gracias por compartir esto conmigo, tu esposa debió haber sido una persona muy especial para ti,” sollozó tratando de contener su llanto, no pensé mi historia le llegara tanto.

“Ella aun es una persona muy especial para mí, jamás dejará de serlo. Pero vivo tranquilo sabiendo que ella está a salvo aquí en Equestria,” en cierta forma no estaba a gusto con mis palabras.

“¿Y… no sabes en donde pueden estar?” preguntó con voz más clara.

“Leí durante mi misión en Rusia que mi esposa e hija fueron transferidas a un refugio en Fillydelphia.”

“¡Eso significa que quizás los encuentres también!” dijo con entusiasmo.

“No lo tomo por hecho, pues leí que dejaron Fillydelphia y no se sabe en donde están. Pero una vez que acabe con toda esta locura de la extinción humana, dedicare mi vida a encontrarlas y asegurar que estén bien, aunque no sepan quién soy,” Applejack se conmovió nuevamente por mis comentarios.

“Eso es tan…” su boca se movió sin emitir palabras, tratando de encontrar una que describiera lo que quería decir, "valiente de tu parte. Jamás había visto a alguien tan valiente como tú. Me da mucho gusto que seas tú quien me acompañe en esto,” dijo con una sonrisa honesta, una que en serio reflejaba que era la portadora de la honestidad.

“Me halaga el que pienses eso, y que me permitas unirme en una ocasión tan especial. Pero ya hablamos bastante de mi, ¿te parece si cambiamos el interrogatorio hacia ti?” dije con una sonrisa juguetona.

Siempre supe que Applejack era una Pony interesante, y esta era la mejor ocasión que había para escuchar su historia completa. Aprendí mas de las Cutie Marks y como obtuvo la suya. Como había sido su vida como un Pony de granja dedicado a la recolección de manzanas junto con toda su familia.

Pasamos todo el viaje a Fillydelphia charlando, disfrutando de nuestra compañía.


Notas:

-Mucho tiempo libre hoy = dos capitulos
-Ya no habrá errores porque mi hermano revisa los capitulos (y los corrige) antes de que los postee.
-Solo se pone buena la cosa

Gracias por leer mi trabajo, mañana sale el 10

Edited by RoflLuxRay - 4/8/2011, 18:43
 
Top
view post Posted on 4/8/2011, 06:51     +1   -1

Estudiante de Celestia

Group:
Artistas Pony
Posts:
649
Reputation:
0

Status:


Va interesante...~ (siguen sin gustarme los PoV... =P)

Noté unos errores por ahi... (no que yo deba marcarlos, soy el menos indicado... pero...

QUOTE
“y será un honor acompañarte en el sitio que ti desees, pues no conozco los restaurantes de por aquí.”

QUOTE
“Mira, Leightn’. Tengo una muy buena razón para correr este riesgo y escaparme a Fillydelphia por unos días…. Acaso… ¿sabes lo que es vivir toda tu vida sin conocer a tu mama o papa?”

QUOTE
“Eso es tan…” su boca se movió sin emitir palabras, tratando de encontrar una que describiera lo que quería decir, valiente de tu parte. Jamás había visto a alguien tan valiente como tú. Me da mucho gusto que seas tú quien me acompañe en esto,”

No puedo evitarlo...

QUOTE
-Ya no habrá errores porque mi hermano revisa los capitulos (y los corrige) antes de que los postee.

:Trollestia1:
 
Top
63 replies since 27/7/2011, 19:49   1418 views
  Share